Saneamiento y regularización de loteos

– Punta Arenas no ha estado ajena a esta cruda realidad luego del surgimiento de los primeros campamentos a inicios de los ’90 a orillas del río de las Minas, en su parte alta, arrastrados posteriormente por un aluvión, y la ocupación ilegal de terrenos en 2016 en prolongación Enrique Abello, que dio lugar a la Toma Puño en Alto.

Los loteos irregulares y los llamados campamentos precarios son de larga data en nuestro país. Durante el tiempo se han desarrollado de diversas formas como recoge el Ministerio de Vivienda y Urbanismo desde la década en 1950 con las tomas de terreno, en la década de 1960 las poblaciones callampas y desde 1970 hasta hoy los campamentos.

Estos asentamientos tienen como elemento en común un conjunto de viviendas agrupadas en un asentamiento geográfico, que dan cuenta de poblaciones de familias y personas que no accediendo a la vivienda formal deciden establecerse en un terreno. Estos terrenos al ser irregulares no cuentan con los servicios básicos ni las condiciones necesarias para que las familias puedan desarrollar una vida digna y satisfactoria. Esto tiene una estrecha relación con los niveles de pobreza, inseguridad y oportunidades que viven las familias en esos territorios, la precariedad de la situación constituyen factores de riesgos latentes para quienes viven ahí.

Para enfrentar estas situaciones el Estado ha desplegado diversas medidas para poder trabajar sobre este problema. Desde 1990 las políticas habitacionales siguieron la línea de aplicar subsidios a la demanda masiva que había dejado el gobierno militar. Hasta un hito importante en 1997 con el programa Chile Barrio que hasta 2007, luego llamado Línea Atención de Campamentos se desarrollaron políticas multidimensional para lograr una transición hacia una integración de barrios y terrenos.

Punta Arenas no ha estado ajena a esta cruda realidad luego del surgimiento de los primeros campamentos a inicios de los ’90 a orillas del río de las Minas, en su parte alta, arrastrados posteriormente por un aluvión, y la ocupación ilegal de terrenos en 2016 en prolongación Enrique Abello, que dio lugar a la Toma Puño en Alto.

Esta semana quedó en condiciones de ser analizado en la Sala del Senado, el proyecto de ley que propone un procedimiento simplificado para el saneamiento y regularización de las obras mínimas de urbanización que requieren aquellos asentamientos poblados que no cuentan con permiso o recepción de loteo.

Una comisión ad hoc acordó que el texto se  enfocará exclusivamente sobre los loteos ubicados en el sector urbano y de manera excepcional sobre los rurales que se encuentren en zona contigua.

El articulado aborda también la situación de los loteos irregulares, en que muchas veces el vendedor desaparece tras engañar a los compradores.

Así, de este modo, se aboga por la dignidad en la vivienda a través de procedimientos como este, que constituye un avance para dejar atrás la precarización.