“Por los Pibes de Malvinas que jamás olvidaré…”. Argentina obtiene su Tercer Campeonato Mundial de Fútbol. Parte 2
Y el tango no podía estar ausente de las canchas y son muchos los vasos comunicantes. Estas dos pasiones llegan o nacen en Argentina a fines del siglo XIX y que poco a poco se abrieron camino en las primeras décadas del siglo XX, ambas cultivadas en sus inicios por las clases populares y rechazadas abiertamente por la “alta sociedad”. Desde Gardel con “Patadura”, se estima en alrededor de seiscientos los tangos dedicados a clubes, jugadores y al fútbol en sí mismo. Entre las composiciones que aluden a equipos, la primera fue “Racing Club“ (Vicente Greco – Carlos Pesce) de 1915, luego tendrían su turno Boca Juniors, River Plate, Independiente, Gimnasia y Esgrima, San Lorenzo, Huracán e incluso Nacional y Peñarol de Montevideo, entre otros equipos con composiciones del 2 x 4.
En 1977 Astor Piazzolla grabó “Mundial 78” que incluye: “Mundial 78”, “Marcación”, “Penal”, “Gambeta”, “Golazo”, “Wing”, “Corner” y “Campeón”. El Mundial de 1978 celebrado en Argentina no fue bien mirado en Europa donde residía Piazzolla (ya hablaremos de ello) por lo cual, las ediciones posteriores salieron con los títulos de “Chador” o “Piazzolla 78” y con todos los nombres de los temas cambiados.
Hubo jugadores legendarios que inspiraron a más de un tanguero, entre otros: Bernabé Ferreyra, José Manuel Moreno, Amadeo Carrizo, Angel Labruna o Ricardo Bochini. Diego Armando Maradona, por su parte inspiraría a los cultores del cuarteto y los rockeros; entre muchos Rodrigo le dedicó “La Mano de Dios” (“Y todo el pueblo cantó (Marado, Marado) / Nació la mano de Dios (Marado, Marado) / Llevó alegría en el pueblo / Regó de gloria este suelo”) y Andrés Calamaro compuso “Maradona” (“Diego Armando estamos esperando que vuelvas / Siempre te vamos a querer / Por las alegrías que le das al pueblo / Y por tu arte también.”).
Los tangueros tenían sus preferencias, el más famoso -Carlos Gardel- es disputado hasta la actualidad por los hinchas de Racing e Independiente, pero al parecer, existen más antecedentes para considerarlo seguidor de “La Academia”.
Anibal “Pichuco” Troilo (“El bandoneón mayor del tango”) fue fanático de River Plate. Gran amigo de los integrantes de “La Máquina” de la década del ’40, la legendaria formación de los” Millonarios” con su célebre delantera: Juan Carlos Muñoz, José Manuel Moreno, Adolfo Pedernera, Angel Labruna y Félix Loustau (en su esquema tradicional y más recordado) por la cual también pasaron Aristóbulo Deambrossi y Carlos Peucelle. “Pichuco” iba a las concentraciones del equipo y allí tocaba el bandoneón y jugaban a los dados. Fue tanto su amor por el club y por el elenco de “La Máquina” que les dedicó el tango “Pa` que bailen los muchachos”, él puso la música y Enrique Cadícamo la letra: “Pa’ que bailen los muchachos/ via’ tocarte, bandoneón/ ¡La vida es una milonga!”.
Alberto Castillo (“El Dotor Castillo) era médico ginecólogo, pero no ejerció su profesión, derivando en actor y cantor de tangos, milongas, candombes y valses criollos. La única excepción fue cuando -como reconocido hincha del Club Vélez Sarfield- las ofició de médico del equipo en una gira internacional. De sus estudios viene lo de “Dotor” y también de su versión del tango “Garufa” (“…durante la semana meta laburo y el sábado a la noche sós un Dotor”…). Castillo en lo más alto de su éxito, llegó hasta Punta Arenas a fines de la década de 1950 contratado por la radio “La Voz del Sur”.
En otra arista, fútbol y política han tenido una estrecha, continua y -en algunos casos- difícil relación. Muchos presidentes de la nación han estado fuertemente ligados a algunos clubes, así fue con Mauricio Macri que pasó de la presidencia de Boca Juniors a la Casa Rosada. El mítico estadio “El Cilindro” de Racing de Avellaneda lleva el nombre de Juan Domingo Perón quien, con el apoyo de su Ministro de Hacienda (también socio de “La Academia”) gestionó los terrenos para su construcción. Perón regaló a cada jugador albiceleste un Chevrolet 1951 por el tricampeonato de 1949, 1950 y 1951.
Continuará…