Desaparece Onemi y se estrena el Senapred, para fortalecer la gestión de riesgo de desastres

A contar del 1 de enero pasado la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) fue reemplazada por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), organismo dependiente del Ministerio del Interior y Seguridad Pública que busca la desconcentración territorial y el trabajo con las regiones, las provincias y las comunas.

El director regional de Senapred, Juan Carlos Andrades, destaca que este cambio normativo apunta a un compromiso-país con la gestión de riesgo de desastres.

Entre las diferencias centrales entre la antigua Onemi y el actual Senapred destaca que este organismo deja de ser una oficina dependiente del Ministerio del Interior, y se transforma en un servicio público, más robusto que adquiere todos los crecimientos y los avances de la antigua Onemi, pero que potencia mayor énfasis en tareas como prevención, planificación, organización y supervisión.

La Onemi se creó en 1974, con el objetivo de atender emergencias como sismos y tsunamis, pero esta visión de trabajo se fue ampliando con el paso de los años.

La experiencia del terremoto y tsunami de 2010 permitió generar un cambio de paradigma para fortalecer el trabajo a realizar. De hecho, la Onu envía un equipo de trabajo a Chile, que se encargó de analizar las acciones desplegadas a partir del terremoto de 2010 y establece varios puntos importantes a reforzar. Uno de los más relevantes se centró en dejar de ser un organismo reactivo, para trabajar más fuertemente en la prevención.

“Ahí se trabajó en el sistema de prevención de respuesta ante desastres”, advierte Juan Carlos Andrades, y explica que “ahí está el motivo en el cambio de nombre”.

En términos de emergencias, los movimientos telúricos figuran entre los principales riesgos que enfrenta el territorio nacional. No hay que olvidar que Chile es el tercer país en el sistema de alertamiento antitsunami del mundo.

En el caso de la región, el director regional de Senapred advierte que las más importantes variables de riesgo son las meteorológicas, que se dan por las situaciones hidrometeorológicas y las emergencias por causa del viento. A ellas se suman los incendios forestales como consecuencia de la sequía que ya está instalada en Magallanes, con déficit hídrico en la Provincia Antártica y una alerta importante en el punto de vista ganadero y de la agricultura en general.

Centro Meteorológico

En ese contexto, resalta la existencia el Centro Meteorológico Regional Austral, que otorga valiosa información que se utiliza todos los días para monitorear eventuales situaciones de riesgo.

En el caso del Senapred en Magallanes, antes se encargaba de coordinar y asesorar, pero ahora fortalecerá además la planificación, la organización y la supervisión con un aspecto de recomendación. “La ley establece tareas a realizar tanto preventivas como de respuesta”, agrega Andrades.

“El cambio  era necesario independiente de la marca o el nombre, porque no podía quedarse sólo en el ámbito de la emergencia sino también en el de la prevención. La descentralización de nuestro trabajo es importante. El Senapred se presenta como un servicio descentralizado con su propio programa y financiamiento, que le permitirá operar de mejor manera con presupuesto otorgado por la Dirección de Presupuesto (Dipres) y ahora, al ser servicio, es unidad técnica y lo avala una ley. No es sólo un cambio de nombre sino un continuador de lo que ha hecho hasta ahora la Onemi, a partir de un trabajo que parte en 2010 haciendo un quiebre de lo que ocurrió como país y pasamos a ser un país reconocido en el mundo como respuesta a las situaciones de riesgo”, refuerza.

Juan Carlos Andrades enfatiza que el nuevo Senapred seguirá con la labor realizada por la antigua oficina junto con las improntas orientadas a preparación y planificación, además de una plataforma regional del riesgo/desastre donde se trabaja con mesas de trabajo que orientadas a las áreas que pueden afectar el desarrollo de la región amparado bajo un instrumento elemental que es la estrategia regional de prevención y respuesta ante desastres.