Percepción negativa de los magallánicos de la economía

La Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad de San Sebastián presentó el Indice de Confianza en la Economía Regional (Icer) para Magallanes.

Este índice incluye la evaluación de la percepción de la economía o confianza del consumidor en la región a través de variables como la situación económica personal actual versus la pasada y la situación económica actual del país y de la zona en que se vive.

Este indicador se calcula semestralmente para las regiones de Biobío, Los Ríos y Los Lagos.

Así, el Icer calculado por primera vez en nuestra región promedió 32 puntos (de un total de 100), instalándose en la zona de pesimismo, es decir, bajo los 50 puntos.

Cabe considerar que, de los seis subíndices analizados, la medición de diciembre arrojó que todos se encuentran en la zona de pesimismo. Por ejemplo, el 39% de los consultados proyecta que la cesantía aumentará en los próximos doce meses, mientras que el 47% considera que la situación económica personal y familiar es peor que hace un año.

Peores son las expectativas respecto de adquisición de viviendas y automóviles, pues el 87% considera que es un mal momento para aquello. Igual de pesimista es la percepción sobre la solicitud de créditos bancarios.

La percepción con mayor puntaje fue la relacionada con el futuro económico de nuestra región, pues un 34% de los encuestados cree que será mejor en los próximos dos años.

El pesimismo observado a nivel de las personas se contrapone con el resultado de otro sondeo realizado a fines del año pasado por la Asociación de Empresas Familiares (Aef) en nuestra zona, entre el 30 de noviembre y el 2 de diciembre y que fuera dado a conocer por nuestro medio a fines de diciembre. En efecto, los exponentes de las empresas familiares regionales se mostraron optimistas de la situación económica de sus empresas y de la zona, en general.

Poder realizar estas comparaciones resulta interesante y, por ello, el estudio practicado por la USS viene a ser un instrumento que aporta en cuanto permite tener una aproximación de la forma en que los magallánicos están percibiendo tanto su economía personal como la regional.