Con dos nuevos canes Gendarmería apuesta por impedir cualquier ingreso de droga a la cárcel
Las “encomiendas” son una de las vías de ingreso de droga a la cárcel. Por eso cada vez son más rigurosos los procesos de revisión de los paquetes que familiares y amistades llevan a sus seres queridos. Y también los registros corporales.
Así y todo los gendarmes igual encuentran droga durante los allanamientos. “Siempre estamos detectando sustancias ilícitas, por eso es tan importante la incorporación de dos nuevos canes ya que al no tener tecnificado el ingreso de visitas o encomiendas los caninos nos ayudan muchísimo, porque siempre detectan la droga o la tenencia”, destacó el director regional de Gendarmería, coronel Dan Toro, en la actividad realizada ayer, donde fueron presentados los dos nuevos ejemplares caninos que llegaron a Punta Arenas: “Merlín”, un Golden Retriever de un año y 2 meses adiestrado para detectar droga; y “Jack”, un Rottweiler de 4 años, para los procesos de “intervención” o motines.
La población penal actual del principal centro penitenciario de la región es de 384 internos. Más 15 en porvenir y 53 en Puerto Natales.
Toro agradeció al alto mando el envío de los canes porque ayudarán a apoyar la seguridad y el registro de encomiendas, así como las visitas que concurren al complejo penitenciario. “De esta manera, reafirmamos la seguridad tanto de los recintos penitenciarios como del personal y de los propios internos”.
El suboficial a cargo del Centro Especial de Adiestramiento Canino, Mario Ampuero Mercegue, puso a prueba los perros adiestrados ocultando una sustancia equivalente a droga en un vehículo. En segundos “Merlín” dio con el paquete.
Actualmente este centro de adiestramiento cuenta con un total de 9 ejemplares caninos, pero con tres listos para ser dados de baja: ocho son de raza Rottweiler más el Golden que se acaba de incorporar.
La seremi de Justicia y Derechos Humanos, Michelle Peutat, calificó de muy buena noticia la llegada de estos canes “porque no debemos olvidar que lo que pasa al interior de las unidades penales impacta en la comunidad por lo que incrementar la capacidad de respuesta de Gendarmería es positivo para la seguridad pública”.