Corte confirmó absolución de la hija del padre asesinado y hermano pagará con 12 años de cárcel efectiva

La Corte de Apelaciones confirmó ayer la sentencia de 12 años de cárcel para el hijo que mató al padre. Y, de paso, la absolución de la hermana en el parricidio del 5 de febrero del año 2018.

La tía de ambos presentó un recurso de nulidad a través de su abogado Juan José Srdanovic. Pero no prosperó, así que la sobrina fue exculpada, al igual como había sucedido anteriormente con la madre.

Para el abogado, resulta inentendible que en Chile no se condene a los encubridores de un delito tan grave como el parricidio, por el hecho de existir un vínculo de parentesco directo con la víctima.

“Esto nos deja en una situación muy débil como sociedad”, reflexionó el querellante al buscar en la Corte de Apelaciones un apoyo a su postura, por el crimen del desabollador Omar Díaz Barría. Este fue ultimado por el hijo, Omar Díaz Pérez, quien terminó condenado a 12 años de cárcel (el fiscal pedía 18 años) con presidio efectivo, descontando el tiempo que lleva en prisión preventiva, que son más de mil días, equivalente a tres años.

La hermana, Constanza Díaz Pérez, fue llevada a juicio por el fiscal Fernando Dobson, pero el tribunal le reconoció participación como encubridora del delito, quedando exenta de toda culpabilidad dado el vínculo de parentesco por consanguineidad con el hermano. Lo mismo que sucedió con la madre, Margarita Pérez, que no fue llevada a juicio.

Querellante

Para el abogado de la hermana de la víctima fatal, Marbeth Díaz Barría, en esto hay un problema legislativo, “ya que es la propia ley la que exime de responsabilidad a los encubridores cuando son familiares”. 

“Estamos ante una norma absolutamente injusta donde se menosprecia el valor de la vida y se incentiva a las personas a encubrir delitos violentos”.

Fallo

Respecto a la teoría de la complicidad por omisión del querellante, el tribunal oral la descartó en su fallo, postura que fue compartida por la Corte y con ello queda desestimada la participación de Constanza Díaz Pérez, en calidad de cómplice.

Con este fallo, los ministros María Isabel San Martin, Claudio Jara y el abogado integrante Marcos Alvarado Sotomayor, dan por zanjado el caso parricidio.

Parricidio

El desabollador Omar Díaz Barría fue asesinado el 5 de febrero de 2018. Ese día estaba en la casa de calle Miraflores, junto a la esposa, Margarita Pérez Muñoz y los hijos, Omar y Constanza.

Una discusión, acompañada por una aparente actitud agresiva del jefe de hogar, terminó desencadenando el hecho de sangre.

Algo que los jueces reconocieron en el veredicto, al establecer que se produjo una legítima defensa incompleta, al ser precedido el crimen por una agresión a la madre por parte del marido, “lo que dio origen a los hechos”.

Y el hijo salió en defensa de la madre, dándole muerte al hombre luego de que ambos se trabaran a combos.

En ese escenario, la esposa le gritó a la hija que estaba en el segundo piso de la casa que bajara y ella subió a quedarse con la nieta pequeña.

El desabollador fue agredido por el hijo con 85 heridas corto punzantes en diferentes partes del cuerpo, muriendo por anemia aguda.

Luego hicieron desaparecer el cuerpo y lo trasladaron a un terreno baldío. La propia madre presentó posteriormente una denuncia por presunta desgracia del marido en Carabineros, siendo que ella sabía que estaba fallecido.

El desabollador fue encontrado el 10 de febrero de 2018, por personas que pasaban por calle Ñandú, parcela N°231 Villa Generosa de Punta Arenas.