Jazz en tu recreo y la intervención musical de Baf Trío al interior de los colegios
Sonó la campana y la síncopa del contrabajo con la batería en conjunto sorprenden a los alumnos al salir de sus aulas de clase. Se trata de una iniciativa llevada a cabo por la agrupación musical Baf Trío, de llevar el jazz y swing hasta 18 distintos establecimientos educacionales a lo largo de las próximas semanas.
Reunidos en torno a la música y sus ejecutores, alumnos y alumnas de los distintos niveles tienen ocasión de pasar un recreo distinto escuchando música en vivo, estimulándose hacia un estilo cuya gracia es precisamente la ejecución e improvisación en el momento, atrayendo las miradas hacia los instrumentos que sean de su interés y sembrando la curiosidad entre la audiencia.
Juan Molina, el baterista del trío, señaló que “cada integrante de la banda tiene un interés sobre lo pedagógico y lo formativo. Para nosotros poder llegar a los colegios es abarcar una mayor cantidad de audiencia que ojalá en el futuro se pueda proyectar en un mayor interés hacia la música, de manera regional y personal, siendo instrumentistas. Básicamente queremos investigar y estar presentes en estos espacios que son libres, fuera de las actividades obligatorias que tiene el colegio. La instancia de “Jazz en tu recreo” genera un espacio libre de apreciación musical y de comprensión de parte del alumnado”.
Dieciocho colegios son parte del proyecto “Jazz en tu recreo”, en los cuales buscan acercar y promover el interés por la música a los más pequeños. El lunes 14 de agosto fue su primera presentación, brindada en el Greenhill College de Punta Arenas, donde tuvieron un gran recibimiento e incluso terminaron su presentación firmando autógrafos sobre las cajas y platillos del set.
“Cada uno fue a diferentes colegios con la carta de compromisos y el proyecto a presentar, golpeando puertas y preguntando. Y así como hubo gente que nos recibió con los brazos abiertos, otros ni respondieron los correos”.
Antonio Soto, el saxofonista detrás de las melodías, señaló que, en comparación a las audiencias tradicionales que tienen, “se siente una energía distinta, obviamente hablando de niños y niñas hay una aceptación por no haber visto este tipo de música y a los músicos como tal. A nosotros nos motiva día a día despertarnos para venir a trabajar y es una carga importante, porque los niños tienen esa fuerza de querer bailar, gritar, jugar, entonces es algo que nos motiva mucho”.
Espacios inclusivos
Detrás de las cuerdas gruesas y la armonía más grave está Víctor Ruiz, quien se refirió a los espacios inclusivos donde se presentarán. “Esto que estamos haciendo se ha hecho muy poco, pero lo innovador de nuestra propuesta es que estaremos haciéndolo también en escuelas especiales, donde hay niños con dificultades y que probablemente muy pocas veces hayan tenido la experiencia de estar expuestos a música y nosotros se las llevaremos directamente a ellos”.
Por otro lado, Antonio Soto menciona que la actividad “nos ayuda a nosotros a divertirnos e interactuar. Y queremos llevar eso a niños que muchas veces no les llega tanta música o este tipo de actividades”.
El miércoles anterior tuvieron presentaciones en los liceos Sara Braun y Luis Alberto Barrera.