El Ñandú viaja a Calama en las manos de Kaukari y un “Niño de cobre”

• Emotiva noche fue la que se vivió como clausura del evento, donde
  destacó la calidad del espectáculo de la artista peruana Eva Ayllón.

A Calama viajará el Ñandú de la Patagonia, luego que esta madrugada la canción “Niño de cobre” obtuviera el primer lugar de la competencia del XLII Festival Folclórico desarrollado en Punta Arenas.

El tema del autor y compositor Eduardo Paredes Olivero fue interpretado por el conjunto Kaukari, destacando desde la primera jornada como uno de los favoritos del público.

En tanto, el segundo lugar fue para “Ven a la Patagonia”, canción de Punta Arenas de la autoría de Lucy Huaquil e interpretada por David Toledo. 

Otro de los premios correspondió al Mejor Intérprete, que recayó en el autor, compositor e intérprete rosarino Nahuel Farías, quien participó con la canción “Duende de las
cocinas”.

La decisión del jurado -encabezado por Pastora Alfonsina- se conoció poco antes de las 1 de esta mañana, previo al cierre de la jornada de clausura con la actuación de Quique Neira.

La jornada final

No es capricho comenzar de atrás para adelante, pero nobleza obliga cuando hay que mencionar el lujo que se dio este festival con la presentación de una “señora de la canción” como les la cantante peruana Eva Ayllón.

Su presentación fue rutilante, con una puesta en escena que destacó por su ya conocida calidad vocal, su capacidad de crear atmósfera con el público y con un grupo de eximios músicos y coristas que estuvieron a la altura de lo que fue el cancionero que llevó al escenario.

Lo suyo fue un encuentro con la música latinoamericana, con la raíz, con el folclore, con el vals, el bolero y esa riqueza que entregan los sonidos afroperuanos.

La trayectoria que la han llevado a convertirse en una de las embajadoras más importantes de la música y la cultura de su país quedó de manifiesto anoche y el público así se lo hizo saber, retribuyendo con aplausos y con los reconocimientos del Festival: Ovejero y Ñandú.

La obra Patagonia

Han pasado 10 años desde que Ariel Torres y Carlos Díaz decidieron unir sus talentos para conformar un dúo que ha transitado por diversos estilos, principalmente rock y folk, para madurar con un sonido propio que les entrega hoy incluso la capacidad de llevar a escena una obra conceptual bajo el nombre de Patagonia.

De la mano de este trabajo, más ecléctico si se quiere, llegaron a escena sumando además los versos y relatos del actor Mauricio Guichapani, que en cada intervención repasó con voz y alma aquellas vivencias que han marcado a fuego a generaciones de magallánicos.

De esta manera, As de Oro ofreció un show muy bien cuidado, bastante acústico si se compara con trabajos anteriores del dúo, pero dejando en claro la etapa de madurez en que se encuentran.

A la hora del cierre

Justo a la 1,20 horas de este domingo 27 de agosto fue el momento de Quique Neira, quien comenzó así una presentación instrumental donde lució la calidad de sus músicos y de los instrumentos propios del sonido reggae.

“Venga arriba esa gente, a ver la energía del lugar… que rico estar de vuelta” fueron sus primeras palabras antes de comenzar interpretando “Dar y recibir”, canción incluida en el tercer disco como solista Jah Rock (de 2007).

Al cierre de esta edición se estimaba que ofrecería un espectáculo de más de hora y media.

Los ganadores: a 5 minutos de no llegar

Luego de recibir su premio, los integrantes del grupo Kaukari se mostraron emocionados y agradecidos de haber tenido la posibilidad de llegar hasta este Festival, revelando que “por una serie de imponderables estuvimos a 5 minutos de no llegar”.

Así lo confidencia un emocionado compositor Eduardo Paredes, quien dijo que los recursos y la distancia, además de la suspensión de vuelos, los tuvo cerca de no participar. “Pero las cosas finalmente se dieron y ya con el hecho de estar acá nos dimos por pagados, y hoy venimos sin nada y nos llevamos todo”.

Asimismo, contó que es la primera vez en 20 años de trayectoria envían un tema a un festival y que es un orgullo que esa primera vez haya sido “en este tremendo evento, del cual jamás dimensionamos la calidad de su gente”.