Escuela 18 de Septiembre refuerza su sello educativo en un emblemático sector de Punta Arenas

– Su directora Patricia Barrios señala que este aniversario tiene un sentido especial, ya que hay satisfacción por los avances registrados en el mejoramiento de los aprendizajes, la notoria baja en la repitencia, el aumento de la asistencia a clases y en el desarrollo de una serie de disciplinas que han incentivado el sentido de pertenencia con la escuela.

Sesenta y cinco años cumple la Escuela 18 de Septiembre. Ubicado en un emblemático sector de Punta Arenas, el establecimiento trabaja por entregar una adecuada formación a niños y jóvenes del sector sur de la capital regional.

El 4 de noviembre de 1958 figura como fecha oficial de creación de la escuela. La comunidad educativa celebrará su aniversario este lunes 6 de noviembre, con un acto público, en calle Prat, en el que participará la banda instrumental de la Quinta División de Ejército.

La directora del establecimiento educacional, Patricia Barrios, señala que este aniversario tiene un sentido especial, ya que hay satisfacción por los avances registrados en el mejoramiento de los aprendizajes, la notoria baja en la repitencia, el aumento de la asistencia a clases y en el desarrollo de una serie de disciplinas que han incentivado el sentido de pertenencia con la escuela.

El recinto cuenta con una matrícula de 390 alumnos, desde prekínder hasta octavo básico. De ellos, 60 son extranjeros, donde predominan menores provenientes de países como Perú, Venezuela y Colombia.

Integración escolar

La integración es uno de los sellos que quiere incentivar la escuela y prueba de ello es que dos de las integrantes del Centro de Estudiantes son extranjeras. Arianna Olivares (14) y Valeria Pozuelo (14) nacieron en Maracaibo, Venezuela, y son presidenta y vicepresidenta, respectivamente, de la organización estudiantil.

Arianna y Valeria realizan sus funciones junto a Kiara Pereira (14), más el apoyo de la profesora asesora, Andrea Bórquez Barriga.

Las dirigentas fueron elegidas en un proceso eleccionario en que participaron los alumnos de quinto a octavo básico. En su trabajo diario realizan una serie de actividades, tanto educativas, como recreativas y solidarias.

Entre otras, se han encargado de efectuar campañas para reunir víveres para las familias más vulnerables de la escuela, o han organizado la fiesta de gala enmarcada en el marco del 65º aniversario,

Andrea Bórquez resalta además que a través del Centro de Estudiantes se incentiva la educación cívica y se resalta la importancia de participar y de votar para elegir a los representantes del alumnado.

La enseñanza del
mapudungun

Lengua Indígena se denomina la asignatura que imparte la escuela a los alumnos de primero a cuarto básico, convirtiéndola en la única de la región que ofrece esta alternativa.

El profesor de Historia, Luis Toledo Villalón, es descendiente del pueblo mapuche. A partir de ese descubrimiento comenzó a aprender esa lengua y a enseñarla a sus estudiantes. Cuenta que lleva el juego a la clase y así los niños van aprendiendo valores como el respeto y la aceptación.

Dahiana Díaz (9), Ashley Gallardo (9) y Lauren Rodríguez (9) destacan la oportunidad de aprender otra lengua y de conocer sobre un pueblo originario de Chile. Alan Guanipa (8) señala que lo que más le gusta de la asignatura son los juegos grupales en los que aprenden una serie de conceptos sobre la forma en que se relaciona el pueblo mapuche.

La música como
expresión creativa

Gerson Oviedo Yáñez es profesor de Música y dirige al grupo vocal instrumental del establecimiento, que ha cosechado positivos resultados en los últimos años.

“Empezamos de cero. Primero trabajamos la vocalización y luego los alumnos comenzaron a tocar instrumentos”, cuenta.

“Después de tres años observé el interés que ellos tuvieron por el área musical en las clases, ese interés me demostró que podían ser capaces de hacer algo más. Su disciplina y su amor por la música y sus cambios positivos en su  autoestima y seguridades personales, me motivaron a proyectar con ellos este hermoso proyecto que se acrecentó día a día, ensayando constantemente, aprendiendo técnicas vocales y armonías desafiantes y complejas”, señala el docente.

Mónica Lemus, Michelle Lemarchand, Agustina Huanchuli, José Medina, Benjamín Cárcamo, Denisse Chacón y Miguel Lepío forman el grupo que, a través del tiempo, ha ido madurando y fortaleciendo sus habilidades y destrezas.

A ellos se suma el coro polifónico de la escuela, que está integrado pór 30 estudiantes de tercero y octavo básico. Su trabajo consiste en interpretación de temas navideños y sacros, con voces blancas y armónicas.

Una impronta y una huella

Patricia Barrios, la directora de la escuela, plantea que el establecimiento se proyecta a la comunidad en diversas actividades artísticas, deportivas y culturales. No oculta su orgullo porque un ex alumno destacó a nivel internacional: el judoca Jorge Pérez Alvarez logró medalla de plata en los Juegos Panamericanos 2023.

Entre los hitos de la escuela, resalta que “somos el único establecimiento que tiene planes y programas propios de lengua indígena mapuche-huilliche, en que se ha realizado obras de teatro y cápsulas educativas de la  cultura y juegos tradicionales con los estudiantes. Mantenemos nuestro compromiso y responsabilidad con el proceso de enseñanza aprendizaje de cada estudiante, inserto en un clima acogedor, motivador y de sana convivencia”.

Y refuerza que “nuestra misión es propender una educación de calidad que orienta su quehacer pedagógico, a partir de un proyecto educativo integral participativo y dinámico, proporcionando herramientas que contribuyan al fortalecimiento y progreso de una mejor sociedad”.

Agrega que este 65º aniversario institucional “es otra oportunidad para renovar nuestra vocación con la educación pública del mejor nivel, y contribuir a humanizar y personalizar el acto educativo, con las convicciones de nuestros valores, con sabiduría, conocimientos,  experiencia, diálogo, y afecto por cada uno de nuestros estudiantes”.