“Los impactos que genere cada uno de los desarrollos deben ser adecuadamente mitigados y considerados en la etapa de evaluación ambiental”
En materias de hidrógeno, Magallanes cierra el año con tres instrumentos importantes para lo que será la planificación y desarrollo de la industria asociada. Uno de ellos es el acuerdo firmado en la región que busca es materializar desde ya las capacidades para que el empleo, mano de obra local, desarrollo de infraestructura para la ciudadanía y la participación de pequeñas y medianas empresas sean incluidas en las cadenas de valor “de la mejor manera posible”. Así lo definió el ministro de Energía, Diego Pardow, en entrevista exclusiva con Pulso Económico.
El segundo instrumento es la entrega del Comité Estratégico, que permitió “dar una visión política de Estado del desarrollo de la industria”, indica Pardow. Y por último el Plan de Acción de Hidrógeno Verde, el cual fue enviado a consulta pública durante la semana pasada.
Impactos de la industria
En cuanto a los impactos sociales y demográficos que implican la instalación de toda una industria nueva en la región, el ministro de Energía indica que han recabado antecedentes para poder proceder en varias dimensiones. “En la parte logística, lanzamos el Plan Logístico para Magallanes, que lo que busca es adecuar la infraestructura logística general portuaria al desarrollo de la región. El resto de la infraestructura pública es algo que vamos a abordar también, está contemplado dentro del acuerdo. Y por cierto todo lo que tiene que ver con las otras políticas sociales, infraestructura pública asociada a colegios, hospitales, viviendas, ha sido una preocupación que desde el día uno el gobernador (Jorge) Flies trajo al Comité Estratégico”.
Profundizando en esa idea, menciona que “la preocupación porque el estándar de vida de los magallánicos y magallánicas no sólo no se vean afectadas en su calidad de vida, sino que aspiren a una mejor calidad de vida producto del desarrollo de esta industria y es algo que vamos a ir abordando en las distintas fases de desarrollo”.
Mitigación de impactos
Dentro de las preocupaciones manifestadas por la ciudadanía han sido mencionadas los potenciales riesgos ambientales asociados a la instalación de la industria, a lo que Pardow explica que “es algo que hay que determinar en la etapa de evaluación ambiental y le corresponderá a la empresa las medidas de mitigación y la manera de hacerse cargo de estos impactos específicos”.
“Los impactos que genere cada uno de los desarrollos deben ser adecuadamente mitigados y considerados en la etapa de evaluación ambiental por los tribunales. Es un proceso que además va a ser participativo, donde la comunidad también podrá hacer sus correspondientes observaciones”, sostiene Pardow. En ese sentido, apunta a “la necesidad de reforzar los equipos locales de evaluación ambiental y es algo en lo que estamos trabajando para que efectivamente la cantidad de técnicos y profesionales a cargo sea la adecuada para ponderar como corresponde los riesgos ambientales de cada uno de esos proyectos”.
Emplazamiento
de la industria
En el plano social, apuntando al trabajo y empleo asociado, el ministro Pardow indica que se ha conversado con los gobernadores de Antofagasta y Magallanes el evitar “el modelo de trabajo que se aplica en la gran minería, donde hay un traslado de muchos kilómetros, interregionales incluso, de los trabajadores y no se produce el arraigo que uno podría ver, por ejemplo, en el proceso industrial en la etapa de expansión petrolera en Magallanes en la segunda mitad del siglo XX. Apuntar a esa doble experiencia, de la expansión petrolera más que a lo que ha ocurrido recientemente con la gran minería es precisamente el desafío que nos toca abordar”.
Algo que se ha mencionado ya es la necesidad de emplazar la industria en sectores donde ya exista construida infraestructura base a podo de poder readecuarla para nuevos usos y tecnologías. “Reutilizar la infraestructura existente, especialmente aquella que está subutilizada de manera de minimizar el impacto al medioambiente y a su vez facilitar y acelerar el desarrollo de la industria. En el caso particular de Laredo, tiene una simbología bien especial, que la facilidad portuaria desde la cual, desde la segunda mitad del siglo XX, se embarcaron las plataformas petroleras vaya a ser hoy en día donde se refinen los aerogeneradores de esta nueva industria”, señala el secretario de Estado.
Beneficios para Magallanes
Pese a que las inversiones y empresas son primordialmente extranjeras, el foco estratégico es que la industria genere beneficios para los ciudadanos del territorio. “Aprovechar el nacimiento de esta industria para fomentar la mano de obra local, la formación de técnicos y profesionales en Magallanes, la participación de pequeñas y medianas empresas en la cadena de valor y potenciar la creación de conocimiento científico en la región. Ahora, esto es algo que ya está sucediendo y es importante que la gente lo perciba así”.
Como ejemplo apuntó a la planta demostrativa de Hif, la cual emplea un 85% de mano de obra magallánica y en conjunto con la Umag han creado un centro de testeo de combustibles sintéticos único en el mundo. “Esperamos que continúe ocurriendo en esta misma medida, dando oportunidades de empleo calificado para Magallanes”.