Con distintas estrategias buscan enfrentar la inasistencia en prekínder y kínder
“Los niveles de transición (prekínder y kínder) están bastante desdibujados, no se encuentran dentro de los jardines, y están a medias en los establecimientos. Lo que queremos es potenciar los niveles de transición para lograr una mayor matrícula, mayor asistencia, ver su sello pedagógico y empoderarlos”, sostuvo María Isabel Díaz Pérez, intendenta de Educación Parvularia de la Superintendencia de Educación, en su reciente visita a Punta Arenas.
Díaz Pérez visitó a los alumnos de prekínder y kínder (NT1 y NT2) de la Escuela Portugal, señalando que desde los niveles de transición se inicia el camino en los establecimientos escolares, “y queremos asegurarnos de que haya trayectorias fluidas y con mayores logros; además, buscamos que esas metodologías puedan aplicarse en el primer y segundo año básico”.
Esta es la primera región que la intendenta visita en este periodo, con la idea de dar a conocer las iniciativas normativas para proteger los derechos, cuya misión tiene la Superintendencia. “Estamos en contacto con los sostenedores, evaluando, por ejemplo, cuánto se ha avanzado en la certificación de los establecimientos y cómo mantienen su reconocimiento oficial”.
Añadió que han estado influyendo en la normativa educativa con un enfoque en la primera infancia, entregando criterios técnicos para mirar con otros ojos lo que es el funcionamiento de los establecimientos educacionales y esto implica todo un equipo, toda una Superintendencia que tiene que incorporar aquellos elementos y nuestros fiscalizadoras y fiscalizadores van entrando a los establecimientos, jardines infantiles, todos los que están en distintos niveles y poder hacer esta fiscalización, pero siempre desde una amistad, de un acompañamiento y ese es el sentido hoy día.
La inasistencia es motivo de preocupación. Hay varias iniciativas para abordarla, siendo lo primero un seguimiento detallado cuando aparece una ausencia que comienza a ser preocupante, y acercarse inmediatamente a la familia para entender qué está sucediendo. “Por otro lado, es fundamental ofrecer buenas prácticas, espacios seguros, de bienestar, donde los niños disfruten, se diviertan, cuenten con buen equipamiento y puedan salir a espacios exteriores; es decir, ofrecer todo lo que una educación parvularia de calidad anhela”.
En cuanto a los reglamentos internos, en su visita a Magallanes, se destacó la importancia de éstos, dado el incremento significativo de distintos tipos de denuncias. “También recibimos denuncias en los niveles de transición, por lo que queremos profundizar en eso, entender qué está sucediendo y creemos que un buen reglamento interno, socializado, difundido, con elementos de respeto mutuo, que promueva diferentes formas de convivencia, será un gran aporte”.
Las denuncias más comunes, en general, están relacionadas con temas de violencia y relaciones entre pares, adultos y niños, lo que ha emergido con fuerza. “Sin embargo, estamos convencidos de que un buen reglamento tendrá un impacto positivo en la convivencia”, concluyó.