Baja presión de grifo obligó a usar camiones aljibes para combatir las llamas

•  La llamas fueron combatidas por 28 voluntarios con cuatro unidades. Los trabajos se concentraron en evitar que se incendiara la vecina iglesia San Francisco de Sales. 

“No fue suficiente la presión de agua de un grifo existente en el sector, para tres carrobombas trabajando en forma simultánea, por eso debimos recurrir nuevamente a la municipalidad para que nos apoye con cuatro camiones aljibe y así poder combatir este tremendo incendio”. Así resumió ayer el comandante del Cuerpo de Bomberos de Porvenir, Pedro Rozas, al ser consultado si la fuerza de la red de agua potable de Porvenir fue impedimento para las tareas de extinción del siniestro que destruyó el Hostal Patagonia y un taller anexo, durante la noche del viernes y madrugada de ayer sábado.

Explicó que el agua que proviene de los grifos tiene presión por gravedad, ya que es distinta a la red domiciliaria, por eso cuando se requiere mayor fuerza se recurre a vehículos estanques. El oficial bomberil agregó que, hasta la mañana de ayer, aún no se había establecido la causa del origen del fuego, ya que el peritaje se iniciaba en la tarde, debido a que todo el personal de la institución se abocó al trabajo en el área del incendio hasta las 5 de la madrugada, pese a que el fuego se dio por apagado antes de la medianoche, después que se diera la alarma pasadas las 22,30 horas del día anterior.

Tres  voluntarios sufrieron alguna descompensación durante el extenuante trabajo de extinción del fuego de la voluminosa construcción. Fueron ayer dados de alta del hospital y se recuperan satisfactoriamente en sus hogares.

Histórica iglesia fue salvada

En el incendio trabajaron 28 voluntarios con cuatro unidades y que la destrucción del fuego afectó a una casa antigua, amplia y de material ligero, más un taller de estructura metálica, en cuyo interior ardieron dos vehículos y un camión. Fue tanto que hubo instantes en que la temperatura superó los mil grados y afectó al cableado eléctrico, debiendo Edelmag cortar la luz de todo el sector comprometido. 

El trabajo fue bien planificado y estuvo abocado a proteger la Parroquia Histórica San Francisco de Sales, la iglesia más antigua de Tierra del Fuego.

Esta fue remodelada hace pocos años, ya que es un patrimonio arquitectónico de la provincia y está separada por pocos metros del edificio incendiado. Por fortuna, no sufrió ni un daño por efectos del fuego ni del agua, pese a que estaba en la dirección de las llamas, abrevió. 

Historia distinta corrió el hostal, cuya estructura y enseres se perdieron por completo, tenía seguros comprometidos, lo cual le fue asegurado por el dueño de la residencia, Mauricio Pérez Araya.

Respecto a los 17 alojados, todos trabajadores de Salfa (que construye el nuevo Gimnasio Padre Zavattaro), éstos fueron hospedados anoche en el Albergue Deportivo Municipal y hoy la constructora los reubicó en el Hostal Arauco.

Molestia con Aguas Magallanes

En tanto, el alcalde de Porvenir, Gabriel Parada, anunció que citó para esta mañana a personal de Aguas Magallanes a que den explicaciones de la baja de presión del sistema de grifos, merma que ayer afectó también a todo el sector céntrico y occidente de la ciudad. Horas más tarde se supo que tuvo su origen en la rotura de una matriz de la red de agua potable en calle Padre Mario Zavattaro, justo donde existió el incendiado gimnasio del mismo nombre, situación que se prolongó hasta bien entrada la tarde, tras los trabajos de reposición de la tubería rota por la empresa sanitaria.