Magallánicos se casan un martes 13 en contra de cualquier superstición
Cada martes 13 muchos supersticiosos piensan dos veces antes de llevar a cabo sus actividades. Especial énfasis le dan quienes fijaron para este día del calendario una fecha importante en sus vidas, como lo puede ser un matrimonio. Sin embargo, en Punta Arenas, esta creencia no fue impedimento para que enamoradas parejas quisieran formalizar su relación y contraer nupcias en este día asociado a la mala suerte. Para ellos, a pesar de las bromas de sus seres queridos, no es tema.
Para la fecha en cuestión del presente mes y año, el Registro Civil e Identificación apuntó a tres parejas que decidieron contraer matrimonio o firmar su Acuerdo de Unión Civil. La primera de ellas tenía agendada su hora para las 11 de la mañana y se mantenían en el salón a la espera de que los papeles fueran legitimados, para así pasar al salón de ceremonias, ubicado en el segundo piso.
Fue el matrimonio número 239 en lo que va del año en Punta Arenas. Contraviniendo lo que muchas veces es pensado o dicho y considerando que el 13 de agosto es el día número 226 del año, ya va más de un matrimonio al día. Y fueron el primero de tres parejas que decidieron contraer matrimonio este martes.
Boris Saavedra Espinoza y Natalia Meneses Jara llevan cuatro años de novios. Se conocieron en Punta Arenas por una aplicación en línea, confiesan entre risas, y pese a “intentar separarse, nunca nos separamos”, comentan con humor. A principios de año, en enero, formalizaron por vez primera su relación con una unión civil y en menos de 6 meses tomaron la decisión de casarse.
“Todo el mundo se reía de nosotros, pero nosotros hemos tenido tantas cosas que ya esto era nada”, comenta Natalia, sobre la decisión de casarse un martes 13. “Tenemos una prima que también se casó un martes 13 y lleva como 30 años casada, así es que tenemos prueba viviente e irrefutable de que son sólo supersticiones”, agrega Boris.
Sólo un punto le amargó un poco el día a Natalia, quien se desempeña como profesora en el Liceo Industrial. Pese a haber pedido con antelación, hace más de un mes, el permiso legal para formalizar este matrimonio, en la mañana le indicó su empleador que “me iban a cobrar los días como permiso administrativo. Me cayó como balde de agua fría, yo lo pedí con anticipación, entonces igual fue un estrés. Nosotros por matrimonio tenemos 5 días legales y a mí me los están cobrando, por lo tanto no están cubriendo la ley”.




