“Yo no soy partidaria de apoyar a todo evento y menos si alguien es formalizado”
Saltó a la política a los 55 años cuando el difunto Presidente Sebastián Piñera la nombró Subsecretaria de Transportes en 2010, en menos de quince años se transformó en una figura relevante dentro de la centroderecha nacional. Su particular estilo la llevó a encumbrarse como la líder de la derecha moderna, esa que no tiene tapujos de hablar de dictadura, apoyar el matrimonio igualitario y que ve como modelo a seguir la Democracia Cristiana Alemana.
Gloria Hutt Hesse es de ascendencia alemana, tiene un pensamiento estructurado y se caracteriza por ser ordenada. Siempre que tiene algún problema recurre a papel y lápiz, y comienza a diseñar estrategias para resolverlo. Ese estilo sedujo al ex Mandatario quien la convocó en sus dos periodos.
Hoy se encuentra recorriendo la región en camioneta junto a la candidata a gobernadora regional, Daniela Arecheta, quien busca arrebatarle el sillón a Jorge Flies. Antes de emprender un largo viaje por carretera hacia Tierra del Fuego, sostuvo una conversación con La Prensa Austral por más de media hora en el comando de la candidata a gobernadora, conocido en la derecha como “el búnker”.
En Magallanes Evópoli tiene hambre de crecer. En las últimas elecciones parlamentarias el parlamentario que ganó por Chile Vamos es cercano a sus filas, mientras que en las de consejero constitucional fueron el partido más votado con el 15% de los votos. Gloria Hutt no quiso revelar cuáles son sus pretensiones a nivel de resultados electorales.
– ¿Esperan entrar al Consejo Regional? ¿Aumentar el número de concejales?
– “Es tan difícil la comparación con el proceso anterior, que es difícil también proyectar. Y yo prefiero poner toda la energía y un poquito más hacia adelante, mirar cómo se ve el panorama. Pero la verdad, y esto genuinamente, yo estoy trabajando con el mismo entusiasmo por cada uno de nuestros candidatos”.
– ¿Cuál es la estrategia que diseña la coalición de cara a las próximas elecciones presidencialeles, teniendo en cuenta que Bachelet crece y Matthei está estancada?
– “Matthei es la figura que está mejor posicionada en el sector de la centro-derecha y derecha. Hace mucho tiempo, es muy sólida y estable, pero no es suficiente para ganar. Necesitamos una estructura, una coordinación que empiece a tener más regularidad. Hasta el momento hemos trabajado bien en Chile Vamos, con muy buena coordinación entre los partidos y tenemos que transformar eso en un proyecto de mayor alcance (…) el desafío para el próximo año es de un alcance mayor”.
– ¿Ese proyecto significa acercarse a los sectores de centro o centro- izquierda? ¿Cómo buscan reencantar el voto que perdieron en 2021?
– “Tiene dos dimensiones. Uno que es esta sintonía con distintos sectores y que en la medida que nosotros seamos capaces de entregar una propuesta más transversal, se abre el límite de la derecha como ya ocurrió cuando se fundó Evópoli. Nosotros aportamos una cantidad importante de votos adicionales al sector que tradicionalmente tenía un tope.
“Hay otro ámbito que es el de las propuestas concretas y aquí estamos por corregir rumbo respecto a las reformas que vienen precisamente de la Presidenta Bachelet”.
Aquí la timonel de Evópoli define que se deben modificar las reformas tributarias, educacional y avanzar hacia una reforma de pensiones “sin sello ideológico”. “Creemos que parte de la propuesta de Chile Vamos es enmendar rumbo y volver a generar la confianza ciudadana”, indicó Hutt.
Caso Audios
– ¿Cómo podría repercutir en el sistema político las más de 700 mil páginas de chat de Luis Hermosilla?
– “Sí, yo creo que esto no es ni de izquierda ni de derecha. Esto es otro punto más para marcar la desconfianza de las personas porque más allá de los vínculos políticos, lo que uno mira como ciudadano o ciudadana es que pueden operar ciertas redes de poder que no son visibles a todos y uno preferiría que el ejercicio del poder fuera transparente y visible (…) Más allá de lo que sea delito, porque puede ser que en esas 700 mil páginas aparezcan diálogos con mucha gente y no todos son delitos. Por ejemplo, yo tengo una relación contigo, te pido que tú me des un permiso, pareciera no ser ilegal, pero si te pago para que me aceleres el permiso eso es cohecho”.
– ¿Usted como ministra de Transportes recibió presiones de lobistas para acelerar algún permiso?
– “Nunca. Ni de ellos ni de nadie y doy fe de eso, porque al menos a mí nadie me llamó para hacer gestión ninguna en favor de alguien que pudiera tener interés”.
– ¿Eso mismo usted lo podría decir de Andrés Chadwick? ¿Pondría las manos al fuego por él de que no tuvo ninguna vinculación con Luis Hermosilla?
– “Es ahí donde se marcan estos dos carriles. El carril especulativo, que ha sido muy nutrido en opiniones, y el judicial. En el carril judicial, cuando fue mencionado, Andrés Chadwick emitió una declaración para aclarar el origen de unos recursos que aparecen ahí mencionados. Y mostró incluso la evidencia de que eran servicios prestados. El, como ministro del Interior, contrató el estudio de Hermosilla por distintos casos, eso no es ilegal tampoco. Entonces, por eso es importante ver qué cosas de esas conversaciones, o eventuales transacciones, traspasan la línea de lo legal. Yo creo que en eso tenemos que esperar que haya una sola voz, que es la de la justicia”.
– ¿Hoy la ciudadanía puede confiar en la resolución que la justicia entregue sobre el caso Hermosilla?
– “El hecho de que se esté investigando, creo que nos da un pie para confiar en la justicia (…) no me imagino que ninguno de los abogados o los jueces van a hacer algo que no sea lo que corresponde hacer. Yo espero que eso ocurra.
“Nosotros en el texto constitucional habíamos propuesto un cambio muy sustantivo al sistema de nombramiento de los jueces, eso fue promovido por el ex ministro Hernán Larraín cuando era ministro de Justicia, yo creo que eso hay que hacerlo, hay que cambiar de manera bien radical la forma en que se nombran los jueces. Lo que no implica, perdón, que los jueces que están ahora trabajando no vayan a hacer su trabajo”.
– El ex ministro de Justicia, Isidro Solís, señaló que “estamos frente al peor Poder Judicial desde el retorno a la democracia” ¿Comparte esas declaraciones?
– “No lo sé, no tengo los antecedentes que él ha considerado para eso, creo que tiene imperfecciones de todas maneras y yo fui favorable a cambiar ese componente que era el nombramiento de los jueces. El sistema de justicia es mucho más amplio, entonces yo por lo menos no tengo un antecedente para decir que es el peor desde el retorno a la democracia”.
– Si los casos Penta y SQM derivaron en mayor transparencia a la hora de financiar la política ¿El caso Hermosilla derivará en un cambio a lo que entendemos por lobby?
– “Creo que sí sería bueno perfeccionar la ley del lobby, pero también pasa, y lo leí hace poco, y me quedó dando vuelta, un estudio decía que mientras más regulación y burocracia tiene un país, más probable es que sea corrupto, porque cuando la gente sabe lo que no se hace, y es fiel a ese compromiso de saber lo que no se hace, no necesita que se lo digan. Uno sabe qué cosas se hacen y qué cosas no, y hay suficiente regulación. Ahora, si es necesario perfeccionarla, habrá que ir por eso”.
– ¿Qué va a hacer Chile Vamos si alguno de sus candidatos aparece salpicado en la arista judicial del caso Hermosilla? ¿Le quitarán el apoyo?
– “En ese caso hay que evaluarlo. Yo no soy partidaria de apoyar a todo evento, y menos si alguien es formalizado y procesado”.




