Tejedora magallánica aporta con su talento en el árbol de Navidad tejido de Ancud
- La creadora destacó su inspiración en la bandera magallánica, conectando Punta Arenas con Chiloé a través de sus tejidos y una tradición familiar que ha pasado de generación en generación.
El árbol de Navidad tejido a crochet, que por primera vez adorna la Casa de la Cultura de Ancud, Chiloé, cuenta con un aporte especial desde Punta Arenas: los cuadrados creados por Any Díaz Huaiquín, magallánica invitada a participar en este proyecto comunitario, quien vivió por años en Ancud y que no dudó en enviar su contribución representando los colores de la bandera magallánica, en una pieza que buscó conectar simbólicamente la región austral con el archipiélago chilote.
“Cuando me invitaron, quise hacer algo distinto, algo que tuviera significado. Así que pensé en la bandera magallánica”, afirma Any Díaz, quien completó sus cuadrados de 40×40 cm en menos de una semana para asegurarse de que llegaran a tiempo.
El tejido no es sólo una técnica para ella, quien es peluquera profesional. Es una herencia familiar que ha marcado su vida y la de las mujeres de su familia. Desde pequeña, aprendió observando a su madre Selma Huaiquín y a su abuela Victoria González, quienes tejían con dedicación en cada momento libre. “Mi abuela y mi mamá se ponían a tejer y yo era niña, que jugaba a su alrededor, porque ellas se sentaban y se ponían a tejer, y de tanto, les decía que yo quería aprender a tejer, insistí tanto, que mi mamá un día me sentó en un banquito tomó una lana y unos palillos y me comenzó a enseñar. Ahora veo que su legado continúa también en mi nieta Ayleen, que con sólo 14 años ya se interesa por el tejido”, relata con emoción.
El árbol de Navidad tejido es una iniciativa de la Casa de la Cultura de Ancud, que este año celebra su primera edición. La idea es conservar los cuadrados de los participantes para, en un futuro, armar un árbol de mayor escala que simbolice el esfuerzo colectivo y la creatividad de sus autores.
Any Díaz, conocida por su pasión por el crochet y los amigurumis, mantiene una activa presencia en redes sociales a través de su cuenta @tejidosypunto. Aunque su profesión principal es la peluquería, el tejido ha sido su refugio y fuente de inspiración creativa. Pasó de su abuela a su madre, luego a ella y ahora a su nieta. “Es algo que nos une como familia y nos recuerda nuestras raíces”, subraya.
La relación de esta magallánica con Ancud no es casual: vivió en la ciudad entre 2013 y 2018, años en los que pudo fortalecer su vínculo con la cultura chilota y reconocer sus raíces familiares. “Mis abuelos y mis padres nacieron en Ancud, y aunque después migraron, para mí siempre ha sido un lugar especial y tengo conocidos allá”.
El árbol ya está en exhibición en la Casa de la Cultura de Ancud, a un costado de la plaza principal, donde residentes y visitantes pueden admirar el trabajo colaborativo de tejedores y tejedoras de diversas partes del país. La pieza de Any Díaz, con los colores azul, amarillo y blanco de la bandera magallánica, destaca entre los tejidos y es un símbolo del cruce cultural entre Punta Arenas y Chiloé.
“Este tipo de proyectos nos une a todos, sin importar de dónde seamos. Para mí fue un honor aportar con algo que representa mi región, y, sobre todo, una tradición familiar que sigue viva”, concluyó Any, quien sigue compartiendo sus creaciones y promoviendo el arte del crochet a través de su página de Instagram.