Argentina adopta sistema acusatorio: jueces y fiscales visitan Chile para aprender de su modelo judicial
Lucas Ulloa Intveen
Apartir del 2 de diciembre del año pasado en la República Argentina se implementa un cambio en el Código Procesal Penal, pasando de un sistema mixto a un sistema acusatorio, similar al chileno. En virtud de las cordiales relaciones bilaterales entre las Fiscalías de la Patagonia, estos días el Ministerio Público y Poder Judicial recibieron a jueces de Río Gallegos, Buenos Aires y al fiscal general interino de Río Gallegos para ver cómo funciona el sistema judicial chileno en persona, en los tribunales de Magallanes.
El fiscal regional, Cristián Crisosto, explica que este tipo de encuentros sirven para estrechar lazos, en el contexto de la colaboración permanente en materias de contrabando internacional, transfronterizo y delitos como la trata de personas y el tráfico de drogas o lavado de activos. “Nos permite poder estrechar lazos, mantener los mismos, puesto que el crimen organizado es internacional. Tenemos que estrechar lazos con objeto de poder estar siempre conectados y que fluya la información necesaria para el efecto de ser más eficientes y más eficaces en la investigación del crimen organizado”.
En la práctica el encuentro tiene una duración de dos días donde podrán asistir a audiencias desde el inicio del procedimiento, controles de detención, audiencias intermedia y de preparación, además de alegatos recursivos ante la Corte de Apelaciones. Además, explica Crisosto, “van a conocer los procesos de trabajo internos de la Fiscalía para que también puedan interiorizarse de cómo funciona el sistema procesal penal acá en la Región de Magallanes”.
El fiscal general interino de Río Gallegos, Julio Zárate, sostiene que esta invitación y la asistencia a las audiencias permite “aprender de los aciertos y de las cosas que nos puedan llegar a enseñar en una dinámica de trabajo”. En lo particular, agrega que “hemos aprendido de cómo ustedes han sobrellevado problemas que nosotros estamos empezando a transitar”.
A su vez, sobre el trabajo colaborativo contra el crimen organizado, Zárate realiza una analogía futbolera. “La primera información que pueda tener sobre crimen transnacional, al primero que le voy a tocar el timbre es a mi vecino, para llegar a buen resultado. En un equipo de fútbol, cuando mete gol alguien, por más que lo meta el 10 el gol, lo festeja el 1, el 10, el 2 y el 32. En este caso es lo mismo. Si el gol lo hace la Fiscalía de Chile, va a ser un gol del equipo”, cierra Zárate.
Visión de magistrados
Claudio Marcelo Vásquez ejerce como juez federal en Río Gallegos, del Juzgado de Garantía de dicha localidad y explica que el cambio al nuevo sistema penal tiene relación con dar mayor celeridad a los procesos judiciales. “Hay todo un proceso de desformalización, que no implica una informalidad total del proceso. Las partes intervienen de manera más directa con el juez, cosa que antes no ocurría porque teníamos un proceso escrito prácticamente total podría decirse, salvo algunas audiencias”.
En esa línea, en el nuevo sistema “hay una visión más directa del juez en cuanto a la presencia de las partes dentro de la audiencia y toma toda la información de primera persona. Eso es una de las ventajas para el caso nuestro como jueces”, agrega el juez Vásquez.
El juez de la Cámara Federal de Apelaciones de Buenos Aires, Roberto Boico, explica que su trabajo tiene relación con el juzgamiento de causas de corrupción del gobierno nacional y que el proceso de implementación de este nuevo sistema “permite la agilidad de los procesos penales y permite también una mayor división de roles entre la Fiscalía, el Ministerio Público y los jueces, eso es muy importante”.
En cuanto a los delitos complejos sincera que “la implementación de un código acusatorio exige recursos humanos, tecnológicos que todavía nosotros no tenemos un estándar como el que necesitaríamos, por lo menos en la ciudad de Buenos Aires”.
A su vez, Boico reflexiona indicando que la jurisdicción de la capital federal “atiende cosas de mucha sensibilidad institucional. Nosotros lamentablemente, a veces las cuestiones que no se resuelven en las arenas pertinentes terminan judicializadas y somos los que terminamos terciando esa disputa. Para que haya un mejor juicio penal, con mayores garantías para las personas que litigan, para que haya mayor transparencia en las decisiones que tomamos, mejores fundamentos argumentales para esas decisiones, hace falta un sistema que me parece a mí que todavía estamos un poquito lejos”.
Destacan infraestructura
Un punto en común de la delegación judicial argentina fue sobre las instalaciones de los tribunales y la infraestructura asociada al sistema. “Estamos años luz específicamente en lo estructural”, señaló el fiscal de Río Gallegos, Julio Zárate. “Se nota una inversión, una puesta y un apoyo enorme por parte del Estado para que ustedes tengan las instalaciones y servicios que tienen, que son de primera línea”.
Igualmente el juez de la Cámara Federal de Apelaciones de Buenos Aires lo primero en observar y destacar fue su sorpresa “por las instalaciones y la infraestructura que tienen los tribunales. Nosotros estamos bastante atrás en esto (…) Veo instalaciones modernísimas, muy amenas para la litigación y para la decisión que tienen que tomar los jueces”.




