Conductor del choque de kiosco y su familia ofrecen disculpas a la dueña
A pocos días del estruendoso que destruyó por completo el kiosco de propiedad de Zenaida Gómez Lepicheo, en la esquina de Magallanes con Ignacio Carrera Pinto, el Departamento de Operaciones de la Municipalidad de Punta Arenas procedió este martes al retiro de los escombros obstruirán el paso a peatones. La faena fue ejecutada por una retroexcavadora, un camión y tres funcionarios municipales, que despejaron el sector.
La dueña del local que durante tres décadas funcionó en ese punto del centro de la ciudad, valoró el acercamiento del conductor responsable del accidente, quien se comprometió a la reparación y se disculpó por lo ocurrido. “Gracias a Dios se han comprometido a cumplir con el kiosco, así que esta semana me dirán si me lo hacen o me lo pagan, así que estoy contenta por ese lado”, señaló. También manifestó que tanto el conductor como su familia se acercaron personalmente a ofrecerle disculpas por su accionar.
Para Zenaida Gómez, de 78 años, la pérdida del kiosco significó mucho más que el daño a una estructura física: fue el fin de una vida dedicada al trabajo y al contacto diario con la comunidad. Durante casi tres décadas, ese pequeño espacio en pleno centro de Punta Arenas fue su fuente de sustento, orgullo y compañía. “Perdí mi kiosco, que era mi vida, era todo”, remató con tristeza.




