Confirman prisión preventiva para clan familiar dedicado a la venta de marihuana y cocaína
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– El O.S.7 detuvo a cuatro chileno y cuatro colombianos.
El Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) de la Fiscalía de Punta Arenas culminó una investigación que dejó a ocho personas detenidas (cuatro chilenos y cuatro colombianos).
Tres son mujeres y al menos cinco de ellos, familiares directos, dedicados en su totalidad al tráfico de drogas, delito por el cual fueron formalizados el pasado jueves 17 de julio y quedaron en prisión preventiva. Tras esto la defensa de los imputados ingresó un recurso para modificar las medidas cautelares de prisión preventiva, lo cual fue desestimado por la Corte de Apelaciones de Punta Arenas, confirmando la medida contra los ocho mputados.
La investigación comenzó en noviembre de 2024. Fue iniciada a partir de una denuncia a la Fiscalía por parte del O.S.7 de Carabineros.
Esta dio paso a una larga indagatoria que involucró escuchas telefónicas y el uso de drones para sobrevolar las viviendas de los traficantes. Dichas técnicas fueron cruciales para posicionar a los integrantes de la banda en cada una de las funciones asignadas dentro de la organización, la cual fue tildada de carácter criminal.
Según trascendió en la audiencia de formalización, el clan familiar mantenía grupos de WhatsApp para coordinar los contactos y encuentros para la compra y venta de la droga, ya sea marihuana o clorhidrato de cocaína. La fiscal Johana Irribarra expuso que la droga “la comercializaban a través de modalidad delivery, entregándola a domicilio o en puntos convenidos con los compradores”. En ese sentido, incautaron tres vehículos utilizados para estos fines.
Por otro lado, las conversaciones telefónicas interceptadas revelaron el grado de participación de los detenidos, principalmente entre los meses de enero y mayo de este año. “Estas llamadas dan cuenta de la actividad ilícita de tráfico de droga”, sentenció la fiscal Irribarra, agregando que “hasta promociones ofrecían” a través de WhatsApp.
Defensa plantea
microtráfico
Ya en la audiencia de formalización, el defensor de los imputados, Pablo Santander, planteó que la figura del delito corresponde a la del microtráfico. La jueza Paula Stange desestimó esta teoría y los días siguientes, el mismo planteamiento fue llevado ante la Corte de Apelaciones.
En sintonía con lo determinado por la magistrada del Juzgado de Garantía, los tres ministros de la Corte de Apelaciones, Marcos Kusanovic Antinopai, Caroline Turner y Juan Villa Martínez, confirmaron la medida de prisión preventiva aplicada a cada uno de los imputados apelantes.
En su argumentación, sostuvieron que “no es posible dar por acreditada en esta etapa inicial del procedimiento alguna tipificación distinta al delito de tráfico ilícito de estupefacientes por el cual fueron formalizados los imputados y menos la planteada por la defensa, en orden a que nos encontraríamos ante un microtráfico de estupefacientes”. La defensa planteó esta calificación jurídica sobre la base de apreciar la situación de cada imputado individualmente, lo que los ministros rechazaron, indicando que “no se ha puesto en duda que actuaban formando parte de la misma organización criminal, en la que se distribuían los roles, así como los elementos y efectos del delito”.
En la misma línea, consideraron que existen antecedentes suficientes para acreditar “un tráfico de estupefacientes a gran escala, tipo empresa, cometido por una agrupación delictual conformada por familiares directos vinculados a ciudadanos extranjeros”.
Finalmente, agregaron que estos mismos antecedentes proporcionados en esta etapa de la investigación permiten presumir fundadamente que los imputados “han tenido participación como autores en el delito que se les adjudica, en términos de asociación de carácter criminal que se dedicaba a la comercialización de drogas, marihuana y cocaína por distintos medios”.




