Juegos, cocina y naturaleza marcaron la Semana de la Educación Parvularia

• El colegio vivió una semana marcada por el entusiasmo, la creatividad y el aprendizaje, con actividades que incluyeron cocina, juegos, exploración al aire libre y espacios de convivencia entre niños, educadoras y familias.

La Semana de la Educación Parvularia en la Escuela Padre Hurtado se transformó en una verdadera celebración del aprendizaje, el juego y la colaboración. Desde el lunes 24 de noviembre, los niveles de prekínder y kínder fueron protagonistas de una programación especialmente pensada para destacar la importancia de la primera infancia y la labor de las educadoras de párvulos. Las actividades permitieron que los niños aprendieran de manera lúdica y compartieran con sus familias en un ambiente lleno de alegría y descubrimiento.

El inicio de la conmemoración estuvo marcado por la ceremonia de apertura, donde se entregó un mensaje a los niños y a toda la comunidad educativa.

El martes, la comunidad escolar desarrolló una de las actividades más esperadas: el “Master Chef”. La experiencia gastronómica fue pensada para trabajar el sentido del gusto, los hábitos de higiene y la manipulación segura de alimentos, además de reforzar aprendizajes de lenguaje, matemáticas y motricidad fina. “Ahí los niños realizaron distintas preparaciones, tanto dulces como saladas, y se trabajó de manera transversal todo lo que es el sentido del gusto, la manipulación de alimentos, la seguridad, la precaución de lavarse las manos”, explicó la educadora Marta Vega.

Durante la jornada, los niños elaboraron recetas con moldes de galletas, cocadas, waffles y sándwiches en forma de árbol de Navidad.

Uno de los aspectos más valorados por las docentes fue la colaboración de las familias, quienes participaron activamente enviando materiales, ingredientes y acompañando a los niños en su entusiasmo.

La educadora Irene Jiménez complementó que la actividad tuvo un fuerte enfoque en la promoción de hábitos de vida saludables. “La actividad consistió en trabajar en grupo distintas preparaciones de alimentos que tenían que ver también con el ámbito de los saludables, porque al principio conversamos sobre los sellos, sobre la alimentación saludable, sobre lo importante de tomar agua, y ellos fueron preparando sus propios alimentos en grupo, con verduras, frutas, con proteínas”, indicó.

Durante el resto de la semana, las educadoras organizaron distintas experiencias que fomentaron la expresión, el juego y la convivencia. Una de las más esperadas fue la “tarde recreativa familiar”, donde los niños y sus familias participaron en concursos, bailes, canciones y juegos colectivos