Sernageomin inicia histórica expedición científica al volcán Burney en Magallanes
Un equipo de especialistas se encuentra en terreno, en la remota Península Muñoz Gamero, recabando información crucial para evaluar el riesgo volcánico y preparar la futura instalación de la primera red de monitoreo en el macizo.
Por primera vez en la historia, un equipo científico del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) está realizando una expedición de exploración en las inmediaciones del volcán Burney, ubicado a aproximadamente 80 kilómetros al suroeste de Puerto Natales, en la Península Muñoz Gamero. La misión marca el inicio operativo de un proyecto clave para la seguridad de la Región de Magallanes.
El objetivo central de la expedición actual, según informó el servicio mediante un comunicado, es identificar y estudiar los registros de erupciones pasadas del volcán. Los geólogos buscan evidencia en el terreno, como depósitos de ceniza y material piroclástico, que permita complementar y contrastar con las capas de cenizas ya identificadas en diversos puntos de la región. Esta información es vital para “dimensionar de mejor forma el potencial impacto de una erupción de este macizo de los Andes Australes”, señala el documento.
El volcán Burney ha sido catalogado por las autoridades como un volcán de alto interés debido a su potencial peligrosidad. En una reunión con el gobernador regional, Jorge Flies, el pasado 1 de abril, el director regional de Sernageomin, Régulo Díaz, lo describió como “uno de los pocos, sino el único, volcán tipo II (que puede potencialmente entrar en erupción) que el Servicio no monitorea”. En esa ocasión, se alertó que en caso de una erupción, la ceniza y el material expulsado podrían alcanzar centros poblados como Puerto Natales y Punta Arenas.
Hacia la primera
red de vigilancia
La expedición en curso no es un hecho aislado, sino el primer paso concreto de un plan más amplio. Según lo acordado en una reunión de trabajo entre el subdirector nacional de Geología, Mauricio Lorca, el director Régulo Díaz y el gobernador Flies, la información recogida ahora sentará las bases para la fase principal del proyecto.
Con el apoyo financiero del gobierno regional, y tras la aprobación de un Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) por $336 millones, está programada para el año 2026 una nueva visita a la zona. En esa oportunidad, el objetivo será la instalación de una red de instrumentos de monitoreo permanente, que incluiría cámaras de vigilancia, sismógrafos y equipos de monitoreo satelital.
“Con apoyo del Gobierno Regional de Magallanes, durante 2026 se realizará una nueva visita a la zona con el objetivo de instalar instrumentos de monitoreo, para conocer el estado actual de la actividad interna de este volcán, siendo el primer volcán incorporado a la red de vigilancia volcánica de Sernageomin”, confirmó el servicio.
De esta manera, el volcán Burney pasará de ser un punto ciego en el mapa de riesgos a convertirse en el primer volcán monitoreado en tiempo real dentro de la red nacional en la Región de Magallanes.
Coordinación y prevención
Las autoridades han destacado la coordinación interinstitucional que está haciendo posible este avance. Tras el encuentro en diciembre, el subdirector Mauricio Lorca afirmó que “la coordinación con las autoridades regionales es clave para que los proyectos de monitoreo y las futuras expediciones, como la que realizaremos al volcán Burney, tengan un impacto real en la prevención de riesgos y en la planificación territorial de Magallanes”.
Por su parte, el gobernador Jorge Flies ha valorado en múltiples ocasiones la iniciativa, resaltando que combina un elemento crucial de prevención y seguridad para la población con la generación de conocimiento científico valioso para una región cuyas dinámicas geológicas son aún poco conocidas.
La expedición actual representa, por lo tanto, un hito científico y de gestión. Mientras el equipo de Sernageomin trabaja en el aislamiento de la Península Muñoz Gamero, en Punta Arenas y Puerto Natales se avanza en los preparativos para dotar a la región, en un futuro próximo, de un sistema de alerta temprana que permitirá vivir con mayor tranquilidad bajo la sombra, hasta ahora silenciosa, del volcán Burney.




