“La contabilidad del delito”: juicio revela estructura financiera y jerarquías de la banda “Sin Fronteras”
El juicio oral contra la organización criminal “Sin Fronteras” dejó al descubierto no solo el contrabando de cigarrillos, sino también el orden administrativo y financiero con que operaba la banda, dirigida por Jessica (chilena) y Yohel (venezolano). Según expuso el fiscal Felipe Aguirre, ambos registraban en cuadernos físicos cada operación, utilidades y reparto de ganancias entre los integrantes.
Estos apuntes -calificados como una contabilidad “rudimentaria, pero funcional”- permitían controlar el flujo de dinero y evaluar el desempeño de los subordinados. La fiscalía detalló que la organización imitaba la estructura de una empresa formal, aplicando pagos y deducciones internas.
Entre los mecanismos identificados figuran:
Sueldo fijo para nuevos reclutas, principalmente extranjeros que recién llegaban a la región.
Descuentos por bencina, colaciones y préstamos, descontados directamente de las ganancias.
Financiamiento centralizado de vehículos y logística, manejado exclusivamente por los líderes.
Mientras los miembros se encargaban del transporte, solo los cabecillas administraban los precios de venta, los contactos en Argentina y los pagos internacionales, consolidando un control total de la operación.
Esta gestión contable -que incluía desde costos básicos hasta el reparto de millonarias utilidades- se convirtió en una de las pruebas clave para que el tribunal estableciera la existencia de una **asociación delictiva jerarquizada, estable y con fines de lucro sostenido**.




