Foto gentileza S. Vojnovic
¡Se lo robaron todo!
Ya prácticamente no queda nada aprovechable en cualquiera de las cabinas de resguardo construidas hace un par de años en los cruces de caminos de la ruta a Onaisín Y-71. Al robo de calefactores y mobiliario empotrado, se agregó la sustracción de puertas y ventanas.