Necrológicas

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– María Angela Muñoz Bustamante
– María Matilde Ibarrola González

2020: el año en que todos vivimos en peligro

Lunes 28 de Diciembre del 2020

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¿En qué momento pasamos de la conmemoración de los 500 años a vivir confinados por la pandemia? Esta pregunta y su respuesta marcan el insospechado giro que tuvo la vida de los magallánicos con el advenimiento del coronavirus

Quienes hoy son niños y jóvenes recordarán el 2020 como un año en que vivieron encerrados, siendo testigos directos de la angustia de sus padres. Los adultos, cuando sean ancianos, recordarán que sobrevivieron a la mayor pandemia de la era moderna. En 20, 30 ó 40 años, si es que no llega un virus peor, el 2020 será recordado como el año del Covid-19, que afectó a todo el mundo, literalmente. Un virus que igualó a todos los estratos sociales, atacando a todos por igual, sin importar si era Rey, Presidente, obrero, político, empresario, barrendero, futbolista, y un largo etcétera; prácticamente nadie se ha salvado.

Las mascarillas, jabón, alcohol gel, guantes y protectores faciales comenzaron a ser parte del diario vivir y al léxico cotidiano se incorporaron términos como pandemia, teletrabajo, salvoconducto, confinamiento, cuarentena, trazabilidad, PCR, mientras que las plataformas virtuales como Zoom y Google Meet reemplazaron los encuentros personales. Hasta los saludos cambiaron, pasándose del apretón de manos o beso en la mejilla al choque de codos.

A nivel mundial fuimos testigos primero, de los países grandes que se echaban la culpa unos a otros: Estados Unidos, China y Rusia se apuntaban mutuamente como los responsables de la aparición del virus. Pero en países como el nuestro, la aparición del virus puso en evidencia las enormes diferencias en la sociedad, que ya habían quedado anunciadas a fines del año pasado en el “estallido social”.

Así termina este año, con cientos de enfermos en los hospitales y personal médico dejando el alma y vida en cada sala, mientras que en las ciudades, largas filas en las tiendas y bancos eran la tónica. Todos con un deseo único para el 2021: que la prometida vacuna, venga de donde venga, acabe de una vez con esta pandemia.