Incendio arrasó con céntrica vivienda, local de comidas y hostal

“Levántense, se quema la casa”, fue el grito que escucharon Elbia Rivas y su marido Manuel Alvarado Tecay. De no ser por esto pudieron haber quedado atrapados entre las llamas, que en minutos consumieron la madera de la antigua vivienda ubicada en Armando Sanhueza esquina Ignacio Carrera Pinto.

Una aparente falla eléctrica en el segundo piso, donde vivía el hermano de Elbia, con su esposa e hija mayor, fue el epicentro del siniestro que se desató ayer, poco antes de las 5 de la mañana.

Estas personas escaparon de las llamas semi desnudas por una ventana y de ahí pasaron a un techo, hasta ponerse a salvo.

Pero antes golpearon fuerte el piso para que Manuel y Elbia despertaran. Lo consiguieron y gracias a eso el matrimonio escapó por la parte posterior. “Alcancé a tomar un extintor del local pero con eso no hice nada. El fuego ya estaba encima de nosotros”, recordó Manuel.

Varias compañías de Bomberos acudieron a la emergencia. Las llamas se veían de lejos y una densa columna de humo rondaba el sector.

Local con historia

Más de 32 años que Elbia Rivas ofrecía exquisitas pastas en el local “Mamma Ristorante”, en Armando Sanhueza 712-B. Una tradición que la iniciaron en el local de al lado, donde funcionaba una hostal que también fue arrasada por el fuego. “Escapamos con lo puesto”, dijo muy afligida la mujer.

Ellos no son dueños, arrendaban, así que por ahora sólo esperan encontrar un local donde poder retomar la actividad culinaria.

Manuel dijo que si alguien los quiere ayudar, lo puede hacer ofreciendo un lugar que puedan arrendar. “ No queda otra. Hay que dar vuelta la página y salir adelante”. El número de celular por si alguien lo quiere contactar es: 985021623.

“Lo perdimos todo, todo. Nada que recuperar. Y recuerdo el momento en que mi marido me grita: flaca, flaca, se está quemando la casa y salí sin zapatos ni nada. Sólo atiné a escapar”, indicó Elbia, hija del fallecido taxidermista Edison Rivas Fierro.

Una hermana y el marido vivían en el local de al lado, por calle Armando Sanhueza. Ahí funcionaba la hostal donde pernoctaban 7 pensionistas. Y en el segundo piso residía el hermano, la esposa y una hija.