Día de la Prensa en Chile

Las efemérides a nivel nacional e internacional se han establecido para llamar la atención de los ciudadanos sobre diversas temáticas, invitarlos a reflexionar y crear mayor conciencia sobre asuntos que son trascendentales para el desarrollo de las sociedades.

Ayer se conmemoró el Día Nacional de la Prensa, instituido en recuerdo de la Aurora de Chile, el primer diario impreso del país. A 209 años de la circulación de su primer ejemplar, la comunidad y los periodistas, en particular, debemos reflexionar sobre los derechos relativos a la prensa y a la libertad de expresión.

Este nuevo aniversario encuentra al país en un proceso relevante, cual es la construcción comunitaria de una nueva Constitución, donde deberán quedar plasmados aquellos principios y derechos consustanciales a la persona humana y a la vida democrática. De hecho, al asumir la nueva directiva del Colegio de Periodistas, su presidente planteó que se trata de una oportunidad propicia para instalar el debate sobre el derecho a la comunicación.

Como en cada época, los periodistas y los medios de comunicación enfrentan enormes desafíos, en una era en que la información veraz y oportuna sufre los embates de las redes sociales y la creación liviana y sin regulación de “medios digitales”.

En tal contexto, la prensa escrita muta a formatos digitales y sólo un par de empresas periodísticas siguen realizando un enorme esfuerzo profesional y financiero para mantener vigentes diarios de corte patrimonial, en el entendido que la libertad de información y un periodismo ético son esenciales para el desarrollo de la democracia.

A nivel regional, sólo esta casa periodística se encuentra entre tales empresas. La Prensa Austral fundada en 1941 cumplió en agosto del año pasado 79 años de existencia y su edición dominical, El Magallanes, circuló por primera vez en 1894 y cuenta ya con 127 años.

Resulta más oportuno que nunca reiterar, entonces, la vocación regionalista de estos medios y su firme convicción de que la libertad de prensa y de expresión exige responsabilidad ética de parte de todos los actores.