Nombramiento de subsecretarios

Paritario y con un mayor tributo a los partidos del pacto Apruebo Dignidad, así resultó la conformación de la nómina de los 39 subsecretarios que integrarán el gobierno de Gabriel Boric, a partir del 11 de marzo próximo.

Todo indica que la demora al plazo autoimpuesto por el Presidente electo -inicialmente había indicado que estas designaciones las daría a conocer hace una semana- se debió a la presión de los conglomerados de su coalición respecto de contar con mayor representación en este línea.

Ello, porque entre los 24 ministros se impuso la paridad, pero se integró a muchos independientes y representantes del PS y el PPD, mermando la presencia de militantes del PC, Convergencia Social y Revolución Democrática. Esto llevó a sostener que el gabinete de Boric era de centro-izquierda.

Ahora, entre las 19 mujeres y los 20 hombres designados como subsecretarios, la composición del nuevo gobierno se inclina un poco más hacia la izquierda. A su vez, esta conformación ha llevado a interpretar que Boric recibió mayores presiones de Apruebo Dignidad, cuyos partidos quisieron recuperar capacidad de control del gobierno.

Efectivamente, el Mandatario electo tuvo mayor libertad para diseñar su primera línea ministerial, en la cual buscó tranquilizar a sus detractores y al mundo empresarial, sobre todo con nombramientos como el de Mario Marcel en Hacienda.

Ya al nivel de subsecretarios, Boric perdió parte de dicha autonomía y debió compensar a los partidos de su pacto. Salvo que esto chocaría con sus propias declaraciones respecto de no entrar en la dinámica del cuoteo político, nadie podría rasgar vestiduras sobre tal opción, entendiendo que el Presidente electo tiene que tratar de equilibrar las fuerzas políticas y sociales afines y ampliar su base de apoyo para garantizar que su gobierno tendrá mayor gobernabilidad y capacidad de diálogo con el nuevo Congreso.