Pese a las intensas precipitaciones se mantiene déficit de agua caída y se espera un invierno más frío

No tuvo los niveles que se registraron en la zona central, pero poco a poco se está notando el aumento de la lluvia caída, que pese a las molestias que ocasiona, ayuda a ir superando el déficit presente. Hasta ayer al mediodía, cayeron 9,7 milímetros, aunque como advirtió de inmediato el climatólogo del Instituto de la Patagonia de la Universidad de Magallanes, Nicolás Butorovic, se mantiene este déficit de, al menos 30 milímetros. 

“En abril, si bien cayó harta precipitación tuvimos solamente 52,1 milímetros y lo normal es 56, y veníamos con arrastre todos los meses hacia atrás. Desde el punto de vista estadístico, abril y mayo son los más lluviosos, esperaríamos que mayo siga lloviendo. Vamos a tener esta condición durante la semana, y el viento se va a mantener, hemos tenido 55-60 kilómetros en Punta Arenas y llegar hasta 70 km. Para mañana (hoy) hasta el mediodía, podría estar más o menos lluvioso, y el viento estará entre 60 y 70 kilómetros hasta el viernes, donde igual ese día y el sábado podría haber lluvia fuerte”, pronosticó.

En todo caso, aunque se diga que el clima estará adverso, en realidad, Butorovic indica que este escenario es positivo, porque “si no llueve en los meses que son estadísticamente de precipitaciones, después es muy difícil alcanzar el valor normal de un año. Y hay que aprovechar hasta agosto, porque desde noviembre parten los meses más secos y es lo que nos ha pasado en los últimos años, si bien el déficit no es tanto tampoco, de 40-50 milímetros el año pasado”.

En cuanto a nieve, indica que por ahora no se espera, aunque Butorovic avisó que “en abril hubo un promedio de 5,5 grados Celsius y lo normal es 6,4 es decir, casi un grado menos y aunque no hubo casi nada bajo cero, se registraron varios días entre 4 y 10 grados. Y la tendencia es que este año, hemos tenido frío en enero, febrero, marzo y abril, que han estado bajo lo normal. No como otros años en que enero y febrero fueron calurosos”.

¿Esto podría anticipar un invierno más crudo? “Estadísticamente sí, sería más helado, viendo la tendencia, pero eso no implica que de repente, en julio, suba. En los últimos años se ha dado la tendencia de que junio, julio y agosto hay un mes que no parece invierno. Hay que ver cómo termina mayo para tener una visión más completa”, finalizó el climatólogo de la Umag.