Seremi de Educación reconoce labor pedagógica de docente magallánica María Angélica Dollenz
E
n una ceremonia realizada en dependencias de la Secreduc, el seremi de Educación Valentín Aguilera Gómez, acompañado de la jefa de la Dirección Provincial Carolina Alvarez Antonín, se destacó la extensa labor docente de María Angélica Dollenz Ojeda.
“Para mí fue hermosísimo. Me llamaron, pero no pensé jamás que recibiría un reconocimiento, porque nunca antes, en mis 50 años de labor profesional, había sido reconocida. La verdad, no lo esperaba; me sentí muy halagada y emocionada a la vez, porque el actual seremi fue alumno mío en el Insuco, en donde lo conocí. Fue doblemente satisfactorio recibir de un ex alumno algo tan bonito”, agradeció la profesora.
En tanto, Valentín Aguilera resaltó que con este homenaje “hemos querido dar un sencillo, pero sentido reconocimiento a muchos profesores y profesoras que han ejercido destacadas funciones y aportes en el sistema educativo y que debido al periodo difícil que hemos experimentado, de pandemia, no habían podido recibir el estímulo necesario a su distinguida función. En nombre de la profesora María Angélica, con más de 50 años en el ejercicio de la docencia, en orientación y con una importante tarea en la difusión y rescate del patrimonio histórico social de la educación, también queremos representar el inmenso aporte que muchos educadores y educadoras de una manera silenciosa y ad honorem realizan en nuestras comunidades educativas. Con este pequeño reconocimiento, también destacamos el gran aporte de los y las educadoras que han entregado buena parte de su vida al servicio de las escuelas, de los niños, niñas, jóvenes, adolescentes y adultos, con la mayor convicción y con la firme esperanza en la educación como un motor de cambio social y de desarrollo humano”, profundizó el seremi de Educación.
María Angélica Dollenz Ojeda se tituló de profesora en la Universidad Católica de Temuco y retornó a Magallanes a ejercer la docencia en 1972, en el Colegio Alemán, y Liceo San José, para luego pasar al Liceo Juan Bautista Contardi (entonces Escuela F-21), y desempeñarse además en la Escuela España, Instituto Superior de Comercio y Escuela Portugal. También dedicó varios años a la educación de adultos. En 2017 publicó un libro titulado “Ciencia de la orientación educacional”, texto que fue elaborado para ir en apoyo de los orientadores que trabajan con niños y adultos. El libro, que ha sido consultado también por psicólogos y sociólogos, se convirtió en un trabajo pionero en la región.
Actualmente plasma sus relatos históricos sobre el desarrollo de la educación en la región a través del suplemento dominical de El Magallanes, donde entrega valiosos antecedentes respecto a la fundación de los colegios y el aporte de diversos personajes que se han fraguado en sus aulas. Su trabajo ha apoyado el enorme aporte que las escuelas públicas han entregado a la educación de la zona.
Con toda esa experiencia, observa que a futuro, la educación pública “requiere de un reforzamiento de la emocionalidad y la parte valórica de los estudiantes, en donde tenemos hoy día una crisis. Allí falta mucho apoyo en los colegios y eso debería mejorarse devolviendo a las orientadoras el papel de relevancia que tuvieron hace años”, sentenció.