Persisten los microbasurales en Punta Arenas

Según antecedentes de la Municipalidad de Punta Arenas, desde 2017 a la fecha se ha eliminado la mitad de los basurales clandestinos existentes en distintos puntos de la capital regional.

Es que periódicamente se realizan operativos para retirar residuos y escombros arrojados en su mayoría en sitios periurbanos de Punta Arenas.

Rodrigo Santana, fiscalizador de contratos de la Dirección de Aseo y Ornato de la Municipalidad de Punta Arenas, señala que se cuenta con un listado de los lugares en los que regularmente se encuentran estos microbasurales y que se realiza un constante trabajo de limpieza en los sitios en que ocurre esta acumulación de residuos. En muchos casos, se trata de chatarra de gran volumen, productos de línea blanca como cocinas o refrigeradores, escombros de obras de construcción, latas, maderas e incluso vehículos.

En muchos de los operativos que realiza el municipio se requiere del apoyo de maquinaria pesada de la Dirección de Aseo y Ornato y de la coordinación con los vecinos de los sectores afectados con estos botaderos clandestinos de basura.

A juicio de Santana, los lugares “preferidos” para los microbasurales son el camino al Andino, la periferia hacia dependencias de Enap y el área periubana en general.

“Nos preocupamos de mantener limpio todo lo relacionado con bienes de uso público”, recalca.

A juicio del fiscalizador, hay quienes no aprovechan la oportunidad de ir al vertedero municipal, ubicado a 15 kilómetros al sur de Punta Arenas (por la ruta 9 Sur), ya que cada vecino cuenta con la opción de llevar 5 metros cúbicos al mes de residuos sin costo alguno.

En ese sentido, lamenta que haya algunos fleteros que son contratados para llevar los productos al vertedero y optan por botarlos en microbasurales.

Sobre la campaña de retiro de “cachureos”, ésta ha tenido positiva acogida y ha permitido que los botaderos clandestinos no sigan creciendo. Y en estos operativos se ha podido comprobar que cada año “estamos sacando menos residuos”.

Los elementos que no se pueden dejar en el vertedero son residuos peligrosos, como por ejemplo ropa contaminada. Tampoco califican neumáticos, baterías de autos y aceite.

El llamado entonces es a que las personas sean responsables con sus residuos y a aprovechar la oportunidad que otorga el vertedero municipal.