Fiscalía solicitó audiencia para formalizar a ex contratista y a un ex supervisor de Enap

En las facturas se falseaban los montos de los trabajos que la petrolera contrataba a la empresa contratista. Una práctica que se estima la venían realizando hace cinco años

En abril de 2020, La Prensa Austral tituló “El correo enviado por equivocación que terminó por desplomar a la empresa Brandt”. Transcurrido más de dos años y medio de esta noticia, el fiscal a cargo del caso, Sebastián González solicitó audiencia para formalizar a los dos querellados, al ex contratista Juan Brandt Barría, y al ex supervisor de Enap, Manuel Soto Godoy.

La querella inicial la interpuso la Empresa Nacional del Petróleo, por los delitos de hurto, falsificación y cohecho. En agosto de este año, se sumó como querellante el Consejo de Defensa del Estado, incorporando los delitos de fraude al fisco y soborno.

La empresa Brandt Servicios Limitada, venía prestando servicios hace 15 años a la estatal, en tareas de mantenimiento y conservación de sistemas y equipos menores en instalaciones, con alcance sobre instalaciones eléctricas, industriales y habitacionales, de calefacción en general, sistemas de calderas, líneas de media tensión, motores, etc.

Todo quedó al descubierto a través del correo que por equivocación envió al contratista a un funcionario que luego terminó siendo despedido de Enap, quien a su vez, posteriormente demandó a la petrolera.

El último contrato con Brandt expiró el 31 de marzo de 2020, y cuyo término anticipado fue declarado por Enap, con fecha 2 de enero de ese año, por incumplimiento grave del contratista a las obligaciones que le imponía el contrato.

Esto lo obligaba a mantener personal propio en las áreas de operación para atender los requerimientos de Enap, que eran solicitados mediante órdenes de trabajo. 

La empresa contratista actuaba representada por su socio mayoritario, Juan Brandt Barría, y como inspector de contrato de Enap, Manuel Soto Godoy, desvinculado de la empresa el 10 de diciembre de 2019, precisamente por los hechos objeto de la querella, quien no era el único inspector de contrato, sino que siempre tenía su “contra rol”. Es decir, otro trabajador que cumplía la misma función cuando al titular le tocaba descanso. 

La querella de Enap

El hecho por el cual Enap presentó la querella quedó al descubierto el 5 de noviembre de 2019, cuando Manuel Soto envía, desde su correo institucional, estando de vacaciones, un mail electrónico al representante de la empresa, Juan Brandt, cuyo asunto refería: “a favor septiembre”, y señalaba, “don Juan. Le adjunto la diferencia de septiembre. Saludos, Manuel”. En lo concreto, solicitaba pagos en su propio beneficio al contratista Brandt.

La investigación iniciada por la Fiscalía permitirá establecer desde cuando se venían ejecutando estas prácticas, que decían relación con pequeños montos defraudados periódicamente, pero que en el tiempo logran constituir una suma considerable.

Lo cierto es que el Juzgado de Garantía de Punta Arenas agendó la audiencia para las 9 horas de esta mañana, sin embargo no hay certeza que los imputados hayan podido ser notificados, siendo posible que se agende nuevo día y hora.

En el caso de Brandt, la Fiscalía perseguirá los delitos de fraude al fisco y soborno, mientras que respecto de Manuel Soto, los delitos de fraude al fisco y cohecho agravado.