PDI investiga las heridas contusas que presentaba en su cabeza el trabajador del campo encontrado muerto
Los restos de la víctima fueron trasladados al Servicio Médico Legal en Punta Arenas.
Los seis ocupantes (5 hombres y una mujer) compartían licor en la vivienda, antes de la muerte de Paillán
En las últimas horas de la tarde de ayer, los funcionarios policiales y expertos peritos de la Policía de Investigaciones (PDI) que concurrieron a Porvenir para indagar la sospechosa muerte del campesino Marcelo Paillán Nahuelcar, de 44 años, padre de una hija de 2 años, culminaron obteniendo las declaraciones de las cinco personas que fueron partícipes el día y hora de los hechos (el pasado lunes 9, cerca de las 20 horas), en el domicilio de calle Santos Mardones esquina Padre Mario Zavattaro de dicha ciudad, propiedad del vecino Jorge Andrés Brzovic. Los seis ocupantes (5 hombres y una mujer) compartían licor en la citada vivienda, antes de la muerte de Paillán.
El subcomisario de la PDI, Matías Cabrera, a cargo del grupo policial enviado por el fiscal jefe adjunto de Porvenir, Manuel Soto Basaure, dijo que tomó todas las declaraciones y que respecto al hecho en sí, “tenemos que establecer, primero, la causa de muerte (de Paillán), la cual vamos a tener recién mañana (hoy), cerca de las 11 horas. La autopsia la practicará el Servicio Médico Legal (SML) en Punta Arenas, hasta donde se llevó hoy (ayer) día la persona fallecida”, agregó.
Especificó que la PDI tiene “una orden investigativa como que esto fue un homicidio, porque la víctima presenta lesiones contusas en su cabeza. No obstante, necesitamos la causa de muerte porque nosotros nos abocamos a tratar el tema como un homicidio. Pero no si la causa del deceso dice, por ejemplo, que fue una hemorragia o muerte por enfermedad”. Explicó que si el deceso fue causado por golpes, podría haber un traumatismo; pero como éste padecía de cirrosis y alcoholismo, podría existir una causa natural de muerte.
Testigo amenazado
Entre las declaraciones, el subcomisario Cabrera indicó que se tuvo el relato del adulto mayor que vivía en la casa de acogida de Brzovic, que fue quien concurrió al mediodía del día siguiente de la muerte de Paillán a denunciar la agresión que éste sufrió al interior del inmueble, y de que se había constatado su fallecimiento esa misma mañana. Aunque el jefe policial ignoraba la situación del adulto mayor. Y, es que entre los amigos y familiares de la víctima se conoció del temor que sufriría tras ser amenazado por concurrir a formular la denuncia.
Por lo mismo es que llamó la atención el martes, que no hubo en ningún momento presencia de la Fiscalía por el caso y mucho menos que actuara la Unidad de Víctimas y Testigos en favor del testigo clave. Por lo mismo, amigos buscaban cómo protegerlo, dado que además era residente recién llegado a Porvenir desde Puerto Montt pocos días antes. Ayer se supo que el fiscal subrogante goza de sus vacaciones y no había nadie en la Fiscalía Local hasta ayer, que llegó el titular, si bien fue quien ordenó las diligencias investigativas desde la capital regional.
No se respetó protocolo
por muertes trágicas
Otro tema que preocupó a la comunidad es que, con el traslado de los restos mortales de Paillán -conocido campesino y cultor permanente del deporte de jineteada-, nuevamente se pasó por alto el Protocolo de 2001 sobre Fallecidos en la provincia de Tierra del Fuego, que indica que las autopsias en casos de muerte trágica se deban realizar en la morgue de Porvenir, hasta donde concurra el médico y personal del SML. Lo anterior, con el fin de evitar prolongar el dolor y los engorrosos gastos de traslado del cadáver para sus deudos, que posterior al exámen legal, deben traer de vuelta al fallecido.