Necrológicas

Planta en laguna Parrillar será la principal fuente de abastecimiento de agua a la población ante la sequía

Sábado 4 de Febrero del 2023

Compartir esta noticia
1,197
Visitas

El río de las Minas y Tres Brazos son la demostración más patente de la crisis hídrica que está azotando a la región. Ambos solamente envían 40 litros por segundo hacia Punta Arenas, por lo que la planta de Aguas Magallanes en la Reserva Forestal Laguna Parrillar se convertirá en la principal fuente para abastecer a la capital regional. Ya el año pasado tuvieron que funcionar durante nueve meses, pero dado el escenario actual, su trabajo pasará a ser permanente. 

La delegada presidencial, Luz Bermúdez, visitó la planta, emplazada a 55 kilómetros al sur poniente de Punta Arenas y que hasta ahora, abastece el 40% del consumo de agua potable de la comuna.

Al estar enmarcado en la Mesa de Trabajo de Déficit Hídrico, estuvo presente en la visita el director regional del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, Senapred (ex Onemi) Juan Carlos Andrades; el jefe regional de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, Alejandro Soto Bórquez, y el gerente regional de Aguas Magallanes, Cristián Adema Galetovic, quien explicó el funcionamiento de la planta, que ha renovado su tecnología en los últimos años.

Adema reconoció que las fuentes de agua han bajado de manera importante “y Parrillar pasó a ser el gran productor de agua para la ciudad, pero llamamos a la conciencia de la comunidad, cada litro que se ahorre nos permite evitar un problema mayor”. Los principales déficit corresponden a los ríos de las Minas, Leñadura y Tres Brazos, “que ya prácticamente no traen agua, y la laguna Lynch es la que ha soportado esta falta de agua, pero que igual está a un 50% de capacidad”, calculó. 

La planta tiene tres niveles, cuenta con cuatro bombas, de las cuales funcionan tres, las que se van alternando para compensar las horas de funcionamiento. “Se renovaron por completo en diciembre, de manera de garantizar el funcionamiento del déficit”. En el segundo nivel, hay una sentina, un gran estanque que recibe el agua del lago. “A través de un tubo de 400 milímetros y por 50 kilómetros, se conduce el agua hasta la estación Leñadura en Punta Arenas. Como estamos más bajo que Punta Arenas, tenemos que bombear por cuatro o cinco kilómetros para traspasar el cerro y después se va por gravedad”, puntualizó Adema sobre el funcionamiento de la planta que si bien se instaló hace más de veinte años, comenzó su trabajo en forma esporádica, pero “el año pasado bombeamos durante nueve meses. Pensamos que va a ser ya casi permanente para compensar la diferencia. El lago Parrillar permite un horizonte mayor para seguir bombeando”, destacó el gerente de Aguas Magallanes, al tiempo que estima que un posible cierre de las otras plantas es un escenario posible ante la progresiva crisis hídrica. “El río de las Minas es la que está más en riesgo, tiene un aporte prácticamente nulo, 40-50 litros por segundo y acá en Parrillar es de 150 y hasta 20 litros por segundo”.

Andrades avisó que todo este trabajo preventivo que están realizando en esta mesa “indica que tenemos que prepararnos para esta sequía. Desde 2015, al cierre de 2022 tenemos un 54% de déficit de aguas lluvia caídas en la región, y eso repercute directamente sobre las precipitaciones sólidas que son las que resguardan los afluentes y que alimentan las lagunas como Lynch o Parrillar, que son el respaldo de Punta Arenas. Tenemos que hablar de cuidar el agua y eso es racionar el uso, no despilfarrarla. Llevamos cinco años in crescendo con el déficit. Hoy no hay desabastecimiento para el uso humano, pero estamos tomando medidas preventivas”, recalcó.