Mejoramiento de las instalaciones escolares

Aun resistido y seguido con no poca suspicacia, la política pública destinada a crear una nueva enseñanza estatal avanza con la instalación paulatina de los servicios locales de educación.

Este nuevo sistema, aprobado en 2018, persigue que el Estado asegure que todos los niños y las niñas, los jóvenes y adultos puedan acceder a una educación pública gratuita y de calidad a través de establecimientos educacionales de su propiedad y administración.

En el caso de Magallanes, la ley estableció que habrá un solo servicio local de educación, territorialmente descentralizado y con patrimonios propios.

Inicialmente, Punta Arenas estaba considerada como una de las comunas pilotos, donde se iba a iniciar el traspaso del sistema municipalizado a este nuevo régimen. Pero, por diferencias razones esto se ha ido postergando, a tal punto que ahora la fecha fijada para tal cambio es la de 1 de enero de 2024.

En este tránsito, ya se designó al director del Slep regional, quien ha estado realizando un trabajo de conocimiento de la realidad regional y de reuniones tanto con alcaldes como con representantes de los distritos gremios asociados a la enseñanza.

Mucho se ha hablado de posibles ajustes de personal y de financiamiento. Pero, existe otra arista de la enseñanza que es importante abordar a la hora de hablar de calidad y de contar con establecimientos que permitan a los estudiantes desarrollarse integralmente.

En efecto, la calidad de la educación y la garantía de que todos los habitantes de este país y de nuestra región, en particular, tendrán acceso a una buena enseñanza también pasan por contar con establecimientos remozados y con la infraestructura necesaria para ello.

Por eso, es importante el anuncio realizado por el director regional del Slep respecto de fondos establecidos para apoyar la infraestructura escolar, teniendo regiones como Magallanes la prioridad por ser parte de los servicios que comenzarán a funcionar el próximo año.

Ahora cabe esperar que todos los alcaldes sean aplicados y pidan a sus equipos técnicos que formulen proyectos y postulen a estos recursos que están disponibles. Sería lamentable desperdiciar esta gran oportunidad y que razones políticas o, simplemente, desidia llevaran a muchos jefes comunales a desentenderse de esta urgencia, pensando mezquinamente que, a partir del próximo año, ya no van a tener la responsabilidad administrativa sobre los colegios que han estado hasta ahora bajo su jurisdicción.