“Hay que acelerar el apoyo y las condiciones para el desarrollo del hidrógeno verde”
Más que una opinión, una realidad es el hecho que hace poco más de un año al hacer el ejercicio de ir a un buscador de la red y colocar “hidrógeno verde”, el resultado se limitaba a lo que realizaba Chile y a uno que otro proyecto en Europa.
Hoy la situación ha cambiado. Estados Unidos anuncia inversiones, Alemania y Brasil firman convenios, España proyecta liderazgo en el mercado a través del Mar y ni hablar de Australia que es la que lidera los planes de producción.
¿Tanto cambió el escenario en poco más de un año? Claro, el factor sorpresa fue y es la guerra en Ucrania, y la necesidad de los países europeos de buscar una energía alternativa a su dependencia del gas ruso.
En ese contexto es que el ex ministro de Energía, Rodrigo Alvarez, advierte sobre la necesidad de acelerar los procesos en Chile para no ceder terreno a una competencia en ciernes.
“Si tuviera que darle una recomendación al sector público, le diría que acelere el apoyo y las condiciones que permitan el desarrollo de esta gran industria para Magallanes, porque tenemos competidores importantes en otros lugares del mundo y debemos aprovechar nuestras ventajas. Pero para eso, debemos actuar con rapidez”, enfatiza.
Sobre el positivo impacto que esta industria puede tener en Chile, y especialmente en Magallanes, Alvarez dice que “es real, no sé si en la dimensión que se pretende, pero va a ser muy importante si se hacen las cosas bien. Eso significa apurarnos como país, y nos pasa también con el litio, porque cada vez hay más señales de otros países interesados en desarrollar proyectos, y hablamos de países como Estados Unidos y Australia”.
Una mirada a las isapres
En otro tema, Rodrigo Alvarez fue consultado por el momento que viven las Instituciones de Salud Previsional y la crisis que se ha ido profundizando en estas prestadoras privadas.
“Es un tema complejo porque hay tres variables que confluyen: la económica que está golpeando a estas aseguradoras, un fallo de la Corte Suprema que hay que respetar (sobre planes) y las distintas posiciones sobre cuál es el mejor modelo de salud a futuro”.
Agregó que es muy importante lo que parece ser la disposición del gobierno a instalar una mesa de trabajo, “porque aquí lo que se requiere es buscar la salida al problema y no agravarlo. Eso ocurriría si se acaba el sistema privado y quedara sólo el público, sería complicar aún más la situación y alejarse de una solución”.
¿Y el modelo de las AFP?
Una de las grandes demandas dentro de lo que fue el estallido social de 2019 fue el término de las AFP.
Hoy a más de dos años el modelo se mantiene tal y cual, y sin mucho viso respecto de un cambio.
“Aquí hay como dos visiones contradictorias y contrapuestas en el propio gobierno, porque uno escucha posiciones generales en cuanto a la administración del sistema y después específicas acerca del nuevo porcentaje de cotizaciones. Y lo importante que se debe entender de una vez, y fue una de las conclusiones del fallido proceso constitucional, es que la gente quiere respuestas en temas como vivienda, salud y pensiones, y para eso es necesario tanto el sector público como privado y no tener esa visión ideológica de que aquí todo tiene que hacerlo el Estado”.
Añade que en el caso de las pensiones, se requiere de la búsqueda de alternativas, porque hay mecanismos y han habido esfuerzos. “Hubo un primer proyecto de reforma de la Presidenta Michelle Bachelet, un segundo del Presidente Sebastián Piñera. Entonces, lo que se requiere son respuestas cuanto antes, porque esto se puede agravar con el tiempo. Y esas respuestas pasan por buscar la participación tanto del sector público como privado para lograr finalmente lo que los chilenos quieren: tener buenas pensiones”.
Respecto del actual modelo, Alvarez sostiene que evidentemente necesita modificaciones, como el que se aumente la cotización, se establezcan mejores mecanismos de conocimiento para la ciudadanía y se busque la mejor combinación para mantener los niveles de seguridad de los recursos que ha dado el sistema, pero con mayor cotización y mayores grados de solidaridad”.