Aumento del presupuesto para Biblioteca y Archivo Regional

El proyecto diseñado para levantar la Biblioteca y Archivo Regional en la zona del casco histórico de Punta Arenas ha quedado preso de los vaivenes del mercado y, en particular, del alza de los precios de los materiales de construcción y de la mano de obra asociada a este sector.

Casi como un destino aciago, las licitaciones no han llegado a buen puerto y, como muchos otros proyectos, al sobrevenir la pandemia todo se fue dilatando. Nuevamente, los precios experimentaron un alza significativa, al punto de afectar a éste y otros proyectos.

Se debe recordar que esta iniciativa surgió como una forma de rescatar el inmueble que albergó otrora la cárcel pública en la calle Waldo Seguel esquina Chiloé.

El camino hacia tal rescate patrimonial comenzó, entonces, en 2013 a través de un concurso de anteproyectos de arquitectura, que contó con el financiamiento del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, teniendo como unidad técnica a la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas.

La última licitación pública fue lanzada en noviembre del año pasado y, a principios de este mes, se abrió la única propuesta presentada. 

Para poder materializar este proyecto, se contempla un financiamiento en base a un esfuerzo mancomunado del gobierno regional, la subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo y el Servicio Nacional del Patrimonio.

El financiamiento oficial contemplado es de 26 mil 92 millones de pesos. Sin embargo, el único oferente elaboró una propuesta económica que supera tal monto en 7 mil 745 millones, al ofrecer hacerse cargo de esta obra por 33 mil 837 millones de pesos.

Se trata de una diferencia sustantiva, la cual pone en un pie forzado al mandante. Pero, en virtud del propósito del proyecto -rescate patrimonial y dotar de una biblioteca y archivo regionales que cuenten con espacios adecuados-, resulta absolutamente necesario que las entidades involucradas en esta iniciativa se coordinen y concurran a suplementar tal brecha económica.

Se trata de una iniciativa relevante que permitirá recuperar espacios públicos, ofrecer a la comunidad un nuevo lugar de encuentro y aproximación, rescate y salvaguarda de nuestra historia, cultura y patrimonio.