Agencia del Congreso para la Descentralización

Diego Benavente Millán
Ingeniero Civil Regionalista

El país ha experimentado en los últimos años un proceso constitucional que sin duda nos dejará además de una nueva Constitución la experiencia vivida con el aporte de todos los sectores políticos de pe a pa. Nadie podrá alegar después que no tuvo posibilidades de participar y en esto es clave el poder aprovechar este último esfuerzo para asegurar y cautelar las perspectivas de desarrollo para las regiones creando las instancias que puedan velar porque la descentralización se imponga en la legislación e institucionalidad del país.

Es de público conocimiento que el crecimiento inorgánico del Area Metropolitana experimentado desde hace varias décadas, se debe a que el efecto neto de las políticas y proyectos públicos ha sido favorecer a los habitantes de Santiago en detrimento de las regiones.

No importa el esfuerzo que se haga en términos de “política de descentralización”; la tendencia en Chile no va a cambiar si los Gobiernos tienden a subsidiar indirectamente a través de sus políticas y proyectos a los agentes radicados en Santiago. Las personas de bajos ingresos de Santiago han recibido un trato preferencial respecto a los pobres del resto del país, lo cual incentiva la migración de éstos desde otras regiones. La suma de todos estos efectos hace que los beneficios percibidos por los habitantes de la Región Metropolitana sean bastante mayores que su potencialidad, lo que ha determinado una concentración excesiva de la población y el capital.

Santiago concentra una preocupación desproporcionadamente alta de parte del gobierno central de turno. El peso de sus problemas es enorme y tienden a magnificarse, lo que hace inclinar irremediablemente la balanza a su favor, postergando a segundo plano a las demás regiones. El problema de la centralización que hay en Chile existe, no hay duda al respecto. Los gobiernos han realizado esfuerzos por mejorar la situación. Sin embargo, esto no se soluciona si no se cambia la idea de que es en Santiago donde se encuentran las mejores oportunidades en trabajo, salud, educación, tecnología, etc. Mucha gente busca Santiago como una manera de encontrar su desarrollo, y la verdad en este momento, pensar así está en toda la lógica de una persona cualquiera que busca progresar. Por lo tanto, se necesitan políticas y leyes, que contemplen la visión y el mejoramiento de las regiones, además de cautelar un desarrollo equilibrado del país en todo orden de cosas, que sólo un proceso legislativo con enfoque descentralizador con rango constitucional puede solucionar.

Aprovechando el proceso constituyente en curso y la idea de poder crear nuevos órganos para el Congreso, es factible contemplar la creación de una Agencia Estatal independiente o una Unidad de Descentralización en el Congreso, que cuide el efecto descentralizador de políticas y leyes de manera similar a las que existen en EE.UU. y Australia. También es posible y como indicación adicional a la Oficina Parlamentaria de Finanzas Públicas e Impacto Regulatorio, adicionar el Impacto Descentralizador y poder conocer en cada ley y política, si estas tienen este impacto y si contribuyen a disminuir el centralismo nacional.

Aprovechando el inicio del trabajo de los Consejeros Constituyentes electos, y el que en su gran mayoría son de regiones, es posible pensar en la creación de una Agencia Estatal Independiente de Descentralización del Congreso, una unidad que tenga por finalidad cuidar el efecto descentralizador de políticas y leyes. Con el fin de ayudar a elaborar políticas públicas que no sean perjudiciales al interés ciudadano regional. Como por ejemplo lo son las leyes de Presupuesto de la Nación y las de los subsidios al Metro y el Transantiago. Probablemente al cabo de algunos años podríamos tener un país distinto, cuyo desarrollo se construye protagónicamente desde sus regiones.