A prisión los dos sujetos formalizados por el feroz asesinato de mochilero osornino
A la cárcel fueron enviadas ayer las dos personas formalizadas por el fiscal Felipe Aguirre como presuntos autores del delito de homicidio calificado que cobró la vida de Abel Maragaño Amolef, ultimado a golpes en la cabeza y todo el cuerpo la madrugada del viernes de la semana pasada.
En la audiencia judicial se conocieron mayores detalles del hecho de sangre, donde hasta el momento aparecen como principales involucrados Heriberto Aurelio Carrasco Arce y Felipe Andrés Astorga Acuña, identidades que el defensor Sebastián Núñez pidió que se prohibieran dar, como aconteció el sábado, cuando se controló la detención de la segunda persona capturada.
Pero en esta ocasión no fue así, ya que el juez de turno, Ricardo Larenas Bustos, aplicó otro criterio y rechazó la pretensión del defensor.
Brutal crimen
En un terreno ocupado ilegalmente en Enrique Abello, frente a pasaje Las Lumas vivían en unas mediaguas, sin agua, luz ni gas, víctimas y victimarios.
La pareja conformada por Abel Maragaño y su conviviente, Belinde Durán Hernández, habitaban en ese predio, en una mejora.
La madrugada del viernes 16 ambos dormían, cuando pasadas las tres de la mañana fueron despertados por los gritos de sus “vecinos” (Carrasco y Astorga).
Es cuando Maragaño sale al exterior y les pide silencio. Esto generó la molestia de ambos quienes comenzaron a agredir a la víctima, primero con patadas y golpes de puño.
Hasta que en un momento toman un fierro y un arma cortante para atacar al hombre que estaba tendido en el suelo y prácticamente sin poder de reacción.
La violencia fue tan extrema que le fracturaron la pierna, sin ninguna posibilidad de pararse, entre golpes y cortes con arma blanca.
“Lo continuaron agrediendo en la zona del pecho o torácica, fracturándole alguna de sus costillas, prosiguiendo con las agresiones con objetos contundentes y cortopunzantes dirigidas hacia la zona del rostro y cabeza de la víctima, intentando este último protegerse con sus brazos y manos, pero le fracturaron el antebrazo derecho”, expuso el fiscal.
La pareja del hombre, que fue testigo de todo, intervino para evitar un desenlace fatal, sin embargo terminó siendo agredida por Heriberto Carrasco.
La mujer logró zafar en medio de los gritos de este último que le decía a su amigo Astorga, “¡agárrala, mátala, para que no sapeé!”.
Ella alcanzó a tomar un celular y comunicarse con Carabineros, pidiendo que fueran enseguida porque a su pareja la estaban literalmente “masacrando”.
Incendio
Mientras los imputados continuaban golpeando a la víctima en cabeza y rostro, prácticamente en esos momentos sin reacción, los sujetos caminaron a la mejora ocupada por Benilde y su pareja y le prendieron fuego.
Carabineros de la Primera Comisaría, con personal de la Sip, llegaron rápidamente y en el lugar detuvieron a Heriberto Carrasco y horas más tarde a Felipe Astorga.
Fue personal de la Tercera Compañía de Bomberos que al llegar se encontró con “grandes llamaradas y el fuego se estaba propagando a los alrededores”, según declaró un oficial, señalando que les tomó una hora y media controlar la emergencia, dada la existencia de árboles y pastizales en el sector.
La víctima, Abel Maragaño, estaba ensangrentada y casi sin signos vitales cuando personal del Samu lo trasladó al hospital, donde falleció cerca de las siete de la mañana, producto de las múltiples lesiones, entre ellas un traumatismo encéfalo craneano grave, una fractura de base de cráneo; múltiples heridas cortantes de cuero cabelludo; traumatismo facial, heridas contusas cortantes faciales; fractura nasal expuesta, entre muchas otras.
A partir de ahora se inicia la investigación en contra de los dos únicos imputados, proceso judicial que deberán esperar en prisión. Carrasco Arce exhibe un nutrido prontuario policial, incluso ya había participado en un anterior crimen.