La mira poco optimista de la CChC sobre la realidad magallánica

En su paso por la región, el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Alfredo Echavarría, destacó por la forma franca y directa en que entregó su opinión sobre la realidad magallánica, sus potencialidades. Sin empacho, dijo carecer de muy buenas noticias al momento de abordar la problemática del empleo en su sector. Si bien la situación de Magallanes no es excepcional respecto a lo que se está viviendo en el resto del país, es necesario tener presente estos porcentajes. A nivel nacional, la caída registrada es de 9% respecto de 2022 y esta tasa es mayor en Magallanes, llegando al 12%.

¿La razón? La ostensible caída de la ejecución presupuestaria y el atraso en levantar las licitaciones de los proyectos.

En los últimos cuatro años, el Ministerio de Obras Públicas levantó 95 propuestas que quedaron desiertas. De éstas, se relicitaron 24 y las otras 70 aún no se han podido volver a levantar. Esto se traduce en 137 mil millones de pesos que no se ejecutaron, afectando en forma directa la economía y, por supuesto, al mercado laboral.

Entre este listado está el Centro Antártico Internacional, cuya primera licitación quedó sin oferente porque no se ajustó el presupuesto conforme al alza de los costos que el sector de la Construcción registró con motivo de la crisis sanitaria y el tiempo post-pandemia. Hoy, se espera que se vuelva a levantar una subasta pública, si bien parece que el Mop busca modificar el proyecto y su diseño para llegar a montos que puedan barajarse mejor.

Pero, el análisis de Echavarría resulta una especie de balde de agua fría: a principios de octubre, el Mop anunció 17 nuevas licitaciones para Magallanes, pero, a tres semanas de terminar este año, sólo se llamado a dos concursos públicos.

Se trataba de una inversión cercana a 59 mil millones de pesos. 

A esto, se tiene que agregar que, a fines de octubre, este ministerio sólo registraba el 56% de su presupuesto ejecutado.

Esta inversión demorada impacta negativamente en el dinamismo del sector y en la economía regional. Por ende, también se traduce en menos oportunidades laborales.

Echavarría habló claro. Resta que las autoridades pertinentes tomen cartas en este asunto.