La crítica situación de Nova Austral

La situación que enfrenta Nova Austral sigue complicándose, al punto que parece inevitable su liquidación.

La historia de esta salmonera, que llegó a Porvenir como una suerte de Rey Midas hace unos 15 años, se fue desdibujando dramáticamente gracias a una serie de malas decisiones y medidas impulsadas por la anterior gerencia.

¿Cómo se pasó de una empresa que se presentaba como un actor líder de la economía fueguina y pionera en el cultivo de salmón sustentable a una compañía que está a un tris de su cierre?

Gran parte de estas explicaciones están expuestas en cientos de fojas barajadas en los tribunales y en cada uno de los pronunciamientos del Tribunal Ambiental de Valdivia.

Luego de varias postergaciones y tratativas, Nova Austral presentó a mitad de mes una propuesta de pago. Pero, la última audiencia celebrada en el Juzgado de Letras y Garantías de Porvenir no fue auspiciosa, pues la junta de acreedores rechazó tal proposición de acuerdo.

La decisión de los acreedores implica dejar a la empresa al borde de la liquidación.

Pese a ello, no se trata de un fin inminente, pues se explorará el camino que abre el artículo 96 de la Ley 20.720 de Insolvencia y Reemprendimiento y Nova Austral podrá presentar otra propuesta a fin de mes, para que sea sometida a votación el 10 de enero próximo.

Se tratará de un día trascendental pues el tribunal de Porvenir podría dictar la Resolución de Liquidación, ello si Nova Austral no presenta la propuesta dentro de los plazos fijados o si el acuerdo es nuevamente rechazado.

Desde la perspectiva del gobierno tanto central como regional, se trata de un escenario adverso, con un impacto feroz sobre la concatenación productiva y el mercado laboral fueguino, pues quedarían desempleadas unas 3.500 personas, tanto trabajadores directos como indirectos. 

Si bien se ha hablado de un plan para enfrentar tal crisis, se desconoce cuál es y qué resguardos y medidas se están ideando para que no colapse la economía doméstica porvenireña.