Estudiantes escondieron piedras en bolas de nieve y rompieron vidrios de dos buses de locomoción

Sin tal vez dimensionar los riesgos y trastornos que puede provocar un juego invernal, estudiantes que ayer en la tarde se encontraban en la plaza Manuel Bulnes apuntaron y arrojaron bolas de nieve a dos microbuses de la empresa Ascendal.

Pero lo grave de esto es que la bola de nieve contenía en su interior una piedra y eso provocó la destrucción de uno de los vidrios laterales.

Así lo confirmó el jefe de Operaciones de Ascendal, Ricardo McNamara, quien junto con lamentar estos hechos confirmó que ayer mismo realizaron la denuncia ante la Primera Comisaría de Carabineros, por los delitos de daños y lesiones.

Las máquinas afectadas cumplían a esa hora (13,45) el recorrido de las líneas 1 y 9 respectivamente. Iban en movimiento cuando recibieron los pelotazos de nieve. Uno de ellos rompió el cristal, pasó al interior y golpeó a una mujer en la boca, la que fruto del impacto resultó lesionada.

Hechos como estos no ayudan en nada al normal flujo de los microbuses, dado que hasta que estén operativos nuevamente son dos máquinas menos en las calles.

Caótico 

Consultado por el desplazamiento de los microbuses el día de ayer, producto del fuerte temporal de nieve, respondió que fue una jornada durísima y “del terror” para algunos conductores.

En algunos sectores la situación fue mucho más caótica, sobre todo en vías con pendiente pronunciada, donde circulan vehículos menores que terminan quedando “pegados” porque no pueden avanzar. Los choferes deben buscar calles alternativas y eso termina provocando retrasos importantes.

“A raíz de esto ayer (viernes) el sistema se ralentizó y por eso los usuarios debieron esperar más de lo habitual”, enfatizó MacNamara.