Defensa de la soberanía y la diplomacia firme ante la construcción del Hito 1
La reciente polémica en torno a la construcción del puesto de vigilancia y control marítimo Hito 1 por parte de Argentina, que traspasó el límite extendiéndose hacia territorio magallánico, ha generado una ola de reacciones y ha puesto a prueba la diplomacia entre ambos países. En este contexto, las declaraciones firmes del Presidente Gabriel Boric, advirtiendo que si Argentina no desmantelaba la construcción, Chile lo haría, han sido un claro ejemplo de cómo abordar este tipo de situaciones con determinación y claridad.
La soberanía territorial es un pilar fundamental de cualquier nación. La construcción del Hito 1 en un punto tan cercano a la frontera no pareció un gesto amistoso, más allá de aceptar la explicación del “error”.
Si bien la Cancillería chilena haya querido desdramatizar lo sucedido, al tratarse de un aspecto tan sensible como es la soberanía y el respeto de los límites, se esperaba una reacción menos “diplomática” y más firme. De hecho, la propia respuesta del embajador argentino en Santiago, quien dijo que se debía esperar hasta el verano para desmontar los paneles pareció una burla.
Es, por ello, que las declaraciones formuladas por el Presidente Boric durante sus últimas horas de su gira europea, fue tan celebrada. El Mandatario se expresó de manera contundente, enviando un mensaje inequívoco sobre la importancia de respetar las fronteras y los derechos territoriales. Es esencial que los líderes nacionales mantengan una postura firme cuando se trata de proteger la integridad del país, sin ceder a presiones externas ni tener complejos.
Fue su postura y comunicación con su par argentino las que llevaron al compromiso del vecino país de desmantelar en las próximas horas los paneles que están sobre territorio magallánico.
La firmeza en la defensa de los derechos territoriales no está reñida con la diplomacia. Al contrario, una acción diplomática efectiva requiere claridad y decisión. Las declaraciones del Presidente Boric han sido un ejemplo de cómo se puede mantener una postura firme sin romper los canales de diálogo. Este tipo de liderazgo no sólo fortalece la posición de Chile en el escenario internacional, sino que también establece un precedente sobre cómo manejar disputas territoriales con otros países.
La firmeza necesaria en estos casos no deber ser tenida como óbice para mantener y fomentar buenas relaciones diplomáticas. Chile y Argentina comparten una extensa historia de cooperación y vecindad, y es en el interés de ambos países resolver las disputas de manera pacífica y respetuosa. Pero, también ha habido momentos de máxima tensión, los que fueron superados por el diálogo y procesos mediadores.
Este incidente subraya la importancia de mantener canales de comunicación abiertos y efectivos.