Magallanes, a 503 años de la primera circunnavegación planetaria

Magallanes es hoy la región con mayor potencialidad de desarrollo de Chile. Esta es una frase pronunciada por el gobernador regional, Jorge Flies, en el contexto del Día de la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, efeméride que se celebró ayer en un acto solemne en el que se distinguió a Asterio Andrade como “Ciudadano Ilustre de la Región”.

El Día de la Región recuerda en hecho histórico de importancia mundial, como fue el descubrimiento del estrecho de Magallanes por parte del navegante portugués al servicio de la corona española, un 21 de octubre de 1520.

Resulta interesante hacer una asociación de ideas en torno a esta efeméride y las declaraciones del gobernador Flies, comenzando por recordar el lema del escudo regional “Prima in terra chilensis” (Primera en tierra chilena, en latín). Tal expresión busca dejar explícita la primacía geográfica e histórica de nuestra región respecto de Chile y del concierto internacional. Esto tiene hoy como parangón las expresiones de la máxima autoridad regional sobre el lugar que ocupa Magallanes en materia de oportunidades y desarrollo, dadas éstas por su posición geográfica, riquezas y ventajas comparativas, pero también en cuanto a su estrategia de desarrollo regional e iniciativas en curso, tocantes a la industria de hidrógeno verde, el desarrollo satelital y la vocación antártica, entre otros lineamientos.

Hace 503 años, la escuadra de Magallanes encontró el buscado paso marítimo que une los océanos Atlántico y Pacífico, cambiando la perspectiva del mundo. Este hallazgo -resultante de “una travesía memorable”, como tan bien la bautizara el Premio Nacional de Historia, Mateo Martinic Beros- también implicó el inicio de la globalización y puso a nuestra región en el escenario internacional.

Cinco siglos después, Magallanes parece estar recobrando aquella importancia, pues los ojos del mundo miran a esta zona buscando respuestas a problemas y desafíos tan acuciantes como el cambio climático, la descarbonización de la matriz energética del mundo, la protección del medioambiente, las enfermedades neurodegenerativas, entre otros. Magallanes es hoy pilar del desarrollo de la industria de hidrógeno verde y del proyecto satelital de Chile.

Todo esto abre infinitas oportunidades, pero, a la vez, enormes desafíos. Uno de ellos es la inversión en I+D+I (investigación, desarrollo e innovación) y el abrazar las tecnologías de punta para modernizar nuestro sistema productivo y hallar las respuestas demandadas. Generar las capacidades humanas e instalar competencias se agrega a esta lista de urgencias.

“Prima in terra chilensis” no es sólo un lema chauvinista. Es un antecedente geográfico e histórico, pero también un llamado que debemos hacer realidad.