Presidente regional de los radicales: “Apoyar a Boric fue lo correcto”

“Hicimos lo correcto”. Aquella frase marcó la conmemoración del 158° aniversario del Partido Radical, cuyo presidente regional, Gonzalo Bascuñán Vargas, resaltó que “los valores y esfuerzos por alcanzar una sociedad justa están plenamente vigentes, y son permanentes. Por eso debemos actuar con esperanza, pero al mismo tiempo con serenidad y templanza para enfrentar el momento político que tendrá por Presidente a un coterráneo nuestro, Gabriel Boric Font”.

El mandamás de la colectividad en Magallanes hizo un repaso por la historia del PR, pero también se refirió a los desafíos del presente y futuro, enfatizando en lo “correcto que fue apoyar la opción de Boric” y desechar la alternativa que representaba su contrincante, “quien constituía un severo retroceso en garantías democráticas que Chile, como quedó demostrado, por una gran e histórica votación, no está dispuesto a conceder”.

Bascuñán dijo que en medio de “la esperanza” que abrió el resultado de la elección, hay un tema que preocupa: “el que haya participado el 55% de las personas con derecho a sufragio, y un considerable 45% se haya abstenido hacerlo. Esta situación debiese entregar al futuro gobierno la claridad política suficiente respecto a la forma en la cual planteará las iniciativas que buscarán los cambios estructurales que el país necesita, junto a una sana cuota de prudencia y ponderación. Y diálogo, mucho diálogo”.

En comunas y regiones

En ese contexto, dijo que es importante profundizar la democracia hacia las comunas y regiones, para que la decisión sobre los asuntos públicos sea más cercana a la ciudadanía y donde ésta tenga un rol más incidental. “Pasos en esa dirección son, entre otros, referéndum y plebiscitos locales; mandatos revocatorios; iniciativas populares de ley, reposición del voto obligatorio, con locales cercanos al domicilio declarado y un sistema electrónico de sufragio complementario de alto estándar, como son las elecciones implementadas por el Servel”, enfatizó.  

El dirigente destacó que el radicalismo tiene historia comprobada en la democratización del país en su más de siglo y medio de trayectoria. “Ser el partido más antiguo de Chile, nos convierte en un partido con tradición pero no conservador. Nuestra tradición es republicana, democrática, racionalista y progresiva. Bajo esa comprensión, debemos plantear con fuerza que somos un partido vivo y en alza. En las pasadas elecciones municipales, el radicalismo como fuerza nacional alcanzó el 7% de los votos; una importante distancia respecto del 1,7% obtenido en la reciente parlamentaria. Eso significa, que en este momento del ciclo político el liderazgo del partido se encuentra en la base social (municipios y gobiernos regionales), lo que hay que seguir fortaleciendo. Ya vendrá la maduración que permitirá fortalecerse en otros niveles, y dicho sea de paso con una nueva Constitución”.