Conexión vial

• En la vida de una ciudad, la planificación vial y, por ende, la conexión terrestre expedita y el mantenimiento de tal infraestructura resultan vitales, pues son el medio a través del cual sus habitantes pueden no sólo conectarse, sino desarrollar actividades productivas.

Punta Arenas ha tenido en las últimas décadas una expansión importante, la cual le ha permitido crecer y albergar una cantidad significativa de pobladores en los sectores altos y también hacia el sur y norte de la ciudad.

Este crecimiento tiene un impacto significativo respecto de la necesidad de proveerles de los servicios básicos, demanda que, por años, no ha podido ser satisfecha o ha tenido una lenta respuesta. Las empresas privadas no han respondido con la agilidad requerida y han descansado en que la presión social llevará al gobierno regional a tener que hacerse cargo de la inversión que aquello implica.

Otro impacto inmediato de esta expansión inorgánica ha sido la demanda de transporte público, lo cual, a ratos, se ha suplido con algunas concesiones para dotar de un servicio mínimo, pero aquello sobre todo respecto del crecimiento horizontal tanto hacia el eje sur como norte de Punta Arenas.

La conexión vial es otra necesidad que queda expuesta con tal crecimiento, pues gran parte de los caminos que conectan estos sectores con la zona urbana sigue siendo de tierra y presenta un gran deterioro durante la época invernal, debido a las lluvias y la caída de nieve.

Pero, más allá del requerimiento de proyectos de pavimentación o asfaltado de dichos caminos, también la prolongación de la ciudad demanda urgente de una planificación vial que se haga cargo tanto de los problemas actuales de falta de conexión y nuevas calles y avenidas, como de los que, producto del constante crecimiento, se necesitarán a mediano y largo plazo.

Al respecto, la mirada ha sido cortoplacista y ha existido
desidia o poca capacidad de dar soluciones permanentes, pero que respondan en forma oportuna a las demandas reales.

En la vida de una ciudad, la planificación vial y, por ende, la conexión terrestre expedita y el mantenimiento de tal infraestructura resultan vitales, pues son  el medio a través del cual sus habitantes pueden no sólo conectarse, sino desarrollar actividades productivas.