Necrológicas
En el kilómetro 9,5 de la Ruta 9 Norte

Primer crematorio de mascotas de la región espera resolución de Salud para entrar en funcionamiento

Domingo 15 de Mayo del 2022

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  • La médico veterinaria Susan Villa cuenta desde febrero con el espacio y un horno especial para animales,
    traído de Inglaterra, pero que no ha podido operar, pese a la alta demanda que existe.

Perros y gatos son, para muchas personas, parte de la familia y la muerte de alguno de ellos, la compañía más fiel y pura que uno puede encontrar, deja un vacío enorme, que no es fácil de reemplazar. Por eso, a la hora de sepultar a una mascota, muchas personas lo dejan en un patio o en una zona cercana, pero en el último tiempo ha proliferado un cementerio de mascotas, en el kilómetro 14 de la ruta sur, camino a Agua Fresca. Sin embargo, este espacio no está normado, pese a su enorme crecimiento.

Una de las alternativas que surge y también para tener siempre el recuerdo de la mascota querida, es un crematorio. Viendo las necesidades de muchos de sus clientes, la médico veterinaria Susan Villa se puso en campaña para crear el primer recinto de este tipo, que ya se encuentra listo para funcionar, en el kilómetro 9 y medio de la Ruta 9 Norte, entrando hacia el sector donde se ubica el canil municipal. Pero pese a que el Crematorio Yoppen, como fue bautizado, está listo desde febrero, aún no cuenta con la autorización de funcionamiento, de parte de la Seremi de Salud.

Sensación de abandono

“La idea surgió de cuando vivíamos en el norte del país y nuestras mascotas se fueron. Cuando volvimos a Punta Arenas, ellas quedaron allá y esa sensación como de dejarlas en abandono, sumado a la necesidad que vi, me llevó a tener el crematorio. Mucha gente consultaba dónde poder dejar a su mascota o qué hacer con ella, porque muchas veces, era tan repentino que quedaban en blanco. Colegas e incluso gente del Cementerio Municipal me ha contado que muchas personas van allá para cremar a sus mascotas y, obviamente, no pueden hacerlo. Entonces, mucha gente tiene que enterrarlas y no cuentan con un lugar, porque viven en departamentos y deben dejarlos en el campo o en este cementerio no formal del sector sur”, explicó Villa.

Entre los trámites que debieron realizar estuvieron el estudio de impacto ambiental de parte de la Seremi de Medio Ambiente, además del que se encuentran esperando, esto junto a los de cualquier otro negocio.

Traído desde Inglaterra

El espacio cuenta con una recepción, una sala de espera, baños para los clientes y otro para el personal, y la sala crematoria, con un horno especial para animales, exportado desde Inglaterra y que tiene capacidad hasta de 100 kilos, por lo que puede recibir desde un hámster a un perro de raza grande. Representó una inversión de 40 mil dólares, es decir, poco más de 34 millones de pesos.

Tras el proceso, las cenizas son entregadas en una de las tantas ánforas con las que cuentan: “Hay de madera, metal, las biodegradables donde uno puede enterrar a las mascotas en un macetero y de ahí sale una plantita, lo que permitiría continuar con el ciclo de la vida”, mostró.

A la espera del permiso

Pero todo esto aún se mantiene a la espera, ya que no han tenido novedades respecto del permiso de funcionamiento. “Eso es lo más angustiante, que la gente ya necesita el servicio y no lo podemos ofrecer. Ojalá salga lo antes posible, porque no hay ninguna norma acerca de crematorios de mascotas, solamente para humanos y no tienen ninguna base para fiscalizar estos espacios”, lamentó Susan Villa.

Lo que sí están definidos son los costos de los servicios: desde 90 mil pesos para mascotas chicas de cero a un kilo hasta de $190 mil para las mascotas de gran tamaño. Están disponibles las redes sociales Crematorio Yoppen en Instagram y Facebook.