Alcalde otra vez dispara contra el gobierno por el tema vivienda: “Se olvidan que son barrios y no guetos”

Claudio Radonich planteó que la gente está cansada de
esperar y ver cómo las autoridades pierden su tiempo en discusiones. “Esto no puede convertirse en una trinchera política”, enfatizó.

Radonich reafirmó aquello de que aquí no se está priorizando el tema de vivienda, aludiendo que además la discusión parece estarse politizando y creyendo que las casas son para la municipalidad y para el alcalde

“No tengo ánimo de polemizar”, planteó el alcalde Claudio Radonich Jiménez en consulta sobre los dichos del ministro de la Vivienda, Carlos Montes, quien en entrevista a este medio señaló que “sólo le diría al alcalde que se informe más al dar este tipo de opiniones”.

El conflicto se arrastra durante varios meses, principalmente con comentarios cruzados entre el jefe municipal y las autoridades regionales de Vivienda, situación que también ha tocado al gobernador Jorge Flies luego que Radonich dijera hace algunos días que tanto Ministerio, como Serviu y gobierno regional no han priorizado el tema habitacional en Magallanes.

Y aunque luego todos se han visto posando para las fotografías de rigor a la hora de anunciar proyectos, poner primeras piedras y entregar soluciones habitacionales, lo cierto es que el ambiente está lejos de ser de los mejores.

Tras lo manifestado por Carlos Montes, el alcalde de Punta Arenas aunque aseguró no tener ánimo de polemizar, no se guardó opinión. Muy por el contrario, salió nuevamente al ruedo haciendo la salvedad que “al ministro lo conozco y respeto mucho”. Sin embargo, reafirmó aquello de que aquí no se está priorizando el tema de vivienda, aludiendo que además la discusión parece estarse politizando y creyendo que las casas son para la municipalidad y para el alcalde, “siendo que aquí sólo se debe pensar en la gente y en quienes llevan años esperando por una vivienda digna”.

Al momento de reiterar lo anterior, puso como ejemplo el reglamento de programación, “que se viene trabajando por meses por parte del Serviu y la seremi, y que fue enviado al gobernador hace un mes sin que exista algún tipo de reparo. Con esa propuesta se retrocede en 20 años, pareciendo pasar por alto el que hoy debemos hablar de barrios y no de guetos”.

Agregó que “este tema no se debe politizar y lo que siento es que la política local ha cruzado un tema perjudicando a los vecinos. Los cambios de criterios modifican un Decreto Supremo sin tener las competencias para hacerlo y eso, además, da cuenta de un total desconocimiento. Lo grave es que si eso se aprueba como está, va a perjudicar a cientos de familias”.

Radonich sostiene que el municipio está preocupado, razón por la cual reitera su mejor disposición para seguir mirando hacia adelante, para continuar avanzando y evitar retroceder como -estima- parece ser la voluntad de algunos. “Además, también hay que valorar el trabajo del Core, su compromiso, y en este caso especial agradecer a los consejeros Miguel Sierpe, Roxana Gallardo y Alejandro Riquelme, que informaron a la comunidad respecto de un tema que no podía quedar en una conversación de cuatro paredes”.

Trabajo conjunto

En ese ánimo de colaborar, expone que ha invitado a las autoridades del Serviu y de la seremía a reunirse con el municipio para trabajar en conjunto, “que entiendan que nuestra región tiene la virtud de ser distinta y que dentro de eso se han hecho los esfuerzos de trabajar en viviendas de mejor calidad, con más superficies, incorporando barrios y ampliando los espacios, todo en un tiempo mucho más acotado a los 10 ó 15 años que se demora en concretar un proyecto en el norte del país. En eso hemos tenido el apoyo del Core de manera transversal. Por eso, cuando se habla de descentralización, de territorios, nosotros somos un claro ejemplo de que cuando hay voluntad se pueden hacer las cosas mucho mejor. Eso se demostró en base a voluntad y trabajo junto a la seremi de Vivienda del gobierno anterior, entonces por qué no hacerlo ahora”.

El jefe comunal añadió que en este tema se debe avanzar y no quedarse pegados utilizándolo como “una trinchera política que genere cortapisas en algo tan sensible y prioritario, menos en un periodo social complicado, con familias que pese a los problemas económicos deben seguir pagando un arriendo, viendo con preocupación como las autoridades discuten y pierden el tiempo”.

El cuestionado reglamento

Pero qué dice el cuestionado borrador de reglamento y cuáles son los puntos que preocupan al alcalde Claudio Radonich.

En el documento que da cuenta del Programa Fondo Solidario de Elección de Vivienda (DS 49 de 2011 y sus modificaciones), se indica que “el programa está destinado a atender preferentemente a las familias que pertenezcan al 40% más vulnerable de la población nacional. Con todo, tratándose de postulaciones colectivas, el reglamento permite que el grupo organizado incluya como máximo un 30% de familias calificadas sobre el 40% y hasta el 90% más vulnerable de la población nacional, siempre que se encuentren en las condiciones de carencia habitacional u otras situaciones de vulnerabilidad socioeconómica que se establezcan por resolución fundada del Ministerio de Vivienda y Urbanismo”.

A través de éste se busca “establecer un procedimiento público y transparente, para la atención de las demandas habitacionales de las familias más vulnerables de la región, lo que en concordancia con los lineamientos del Plan de Emergencia Habitacional, el Convenio de Programación Minvu Gore, 2021-2027, se traduce en contribuir a la reducción del déficit habitacional cuantitativo; en particular el derivado del allegamiento, hacinamiento, de la habitabilidad precaria y los campamentos”. 

Luego sostiene que para la elaboración del reglamento se han recogido las observaciones realizadas por el Consejo Regional y/o gobierno regional, en virtud del convenio de programación anterior, estableciendo parámetros razonables.

Uno de los puntos cuestionado por Radonich dice relación con el porcentaje de vulnerabilidad según Registro Social de Hogares. Al respecto, el reglamento establece que “el grupo deberá conformarse prioritariamente, con al menos un 90% de familias pertenecientes al 40% de calificación socioeconómica, según Registro Social de Hogares y aceptándose hasta un 10% de familias calificadas sobre el 40% y hasta el 90% de calificación socioeconómica, siempre que éstas se encuentren con un Déficit Habitacional Alto, de acuerdo con el Registro Social de Hogares (RSH)”. En este caso, Radonich indica que se pasa del 70% al 90% (de familias pertenecientes al 40%) lo que significa una dificultad, que estima es un problema extra y que deja fuera a cientos de familias.

También fustiga detalles en las construcciones y requisitos de urbanización adicionales, como el que las calles deben ser de al menos 6 metros, algo que a juicio del jefe comunal corresponde a un pasaje.