Necrológicas
  • – Marcos Pérez Amaya
  • – Gerardo Fores Schulze
  • – Norma Ojeda Levicoy
  • – Alberto Pinto Barría
  • – Magallys Montaña Estefó
  • – Janet Arismenia Muñoz Cárdenas
Desde ayer enfrenta un juicio por “trata de personas”

“No soy un delincuente, no soy un aprovechador, ni abusador”, declaró acusado de traer a 8 haitianos a trabajar a Natales

Viernes 10 de Marzo del 2023

Compartir esta noticia
38,908
Visitas

Por “trata de personas, con fines de trabajo forzado, servidumbre, esclavitud y prácticas análogas”, fue formalizado en marzo de 2021 Jaime Cabrera Almendra, y enviado por un tiempo a la cárcel.

Justo dos años después, ayer, comenzó el juicio oral en su contra, proceso que podría prolongarse por 14 días o más. 

La fiscal Wendoline Acuña asegura que probará la culpabilidad del acusado, mientras que el defensor, Mario Elgueta, espera conseguir la absolución de su cliente.

Cabrera renunció a su derecho a guardar silencio y declaró al comienzo del juicio. Demostrando una personalidad imponente, negó los cargos en su contra afirmando que nada de lo que se le acusa es cierto. Refutó que las condiciones de los ciudadanos haitianos fueran deplorables en el lugar donde trabajaban para él.

Todo lo contrario a lo que plantea la fiscal. “Los hechos son fruto de una larga investigación de más de tres años, originada en una denuncia que presentaron varios de estos ciudadanos haitianos que fueron traídos a trabajar a Natales en condiciones inhumanas, por un compatriota de las víctimas”.

Este hacía los contactos para trasladarlos desde Santiago a Punta Arenas, siendo su destino final la capital de Ultima Esperanza, “con la finalidad de realizar trabajos forzados”.

Fueron llevados a más de 64 kilómetros de distancia, específicamente a unos 10 kilómetros de Villa Renoval. Un lugar sin urbanización, donde los dejaron en una instalación de material ligero. Ahí se resguardaban con plásticos, que Acuña tildó de “ranchas”.

Según la fiscal los tenían sin conexión telefónica y menos internet. Tampoco contaban con servicios básicos, luz, calefacción y alcantarillado.

Tampoco podían salir de este lugar porque no tenían locomoción. Además que desconocían las vías de conexión terrestre.

Con pagos muy inferiores a los que recibían los chilenos por recolectar, limpiar y almacenar turba. Tampoco disponían de la ropa adecuada para efectuar estas faenas. 

Largas y extenuantes jornadas de trabajo. De lunes a domingo, sin días libres. Y del pago final que recibían, “el imputado les descontaba fotocopias, fotografías, contratos de trabajo, comida no perecible y el propio traslado que efectuó de todos ellos, desde Santiago a Natales”.

“No soy delincuente”

“No soy un delincuente, no soy un aprovechador, ni abusador, ni un montón de cosas que se me imputan. Y voy a estar acá todos los días porque tengo la convicción de que no he hecho nada”, le hizo saber a los jueces el acusado.

La contraparte, la fiscal Wendoline Acuña, dijo a La Prensa Austral que “para nosotros existe el delito de trata de personas con el fin de trabajos forzados. Es la hipótesis por la cual estamos acusando: el engaño y aprovechamiento de vulnerabilidad de los ciudadanos haitianos. Esto tiene que ver con la precariedad que vienen de su país de origen. La pobreza extrema, que son condiciones que los llevaron a emigrar a nuestro país”.

El abogado defensor, Mario Elgueta, pretende sostener lo mismo que obtuvo como sentencia en tribunales laborales donde su cliente fue absuelto. Sostiene la inexistencia de los fundamentos de la acusación, “la participación y procedencia del tipo penal que se pretende imputar”.

Pin It on Pinterest

Pin It on Pinterest