Los desafíos del Día Mundial de la Salud Mental

El Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra cada 10 de octubre (hoy), tiene como objetivo el impulsar el cuidado de todas las personas en esta materia, y a la vez concientizar acerca de los problemas que padecen individuos a causa de los trastornos emocionales y psicológicos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que Chile es el sexto país de América Latina con mayor tasa de suicidios, superando la media regional. Además, es uno de los países de la región con mayor prevalencia de enfermedades mentales, lo que se vio acrecentado durante la pandemia, periodo en el que un 23,6% experimentó problemas de salud mental.

Luis Rozas, psicólogo de RedSalud, advierte que “en Chile, enfrentamos desafíos significativos en esta materia, con altos niveles de inseguridad, desconfianza, y de prevalencias de enfermedades mentales. Por lo mismo, es esencial prestar atención a nuestras necesidades emocionales y relacionales, aprender a cuidarnos a nosotros mismos y a los demás, cultivar emociones que promuevan la cooperación y abordar de manera positiva aquellas que nos generan malestar; estos son pasos esenciales en nuestro camino hacia un mayor bienestar”.

Entre las recomendaciones claves que entrega el profesional, figuran: pedir ayuda a estar alerta a los síntomas; cuidar la rutina del sueño; realizar actividad física; cuidar la alimentación y evitar los excesos; tener momentos de ocio; fijarse metas, y reducir las horas en los dispositivos electrónicos.

Ciertamente, la pandemia del Covid-19 generó efectos nocivos sobre la salud mental de la población, con un fuerte aumento en los niveles de estrés y ansiedad, empujando ello a que el Presidente Boric instalara este nuevo flagelo en el centro de sus políticas públicas, al anunciar la construcción de 15 establecimientos de atención y el desarrollo de otros 23.

El fuerte deterioro de la salud mental es otra de las deudas pendientes en Chile, una lucha silenciosa, que demanda una estrategia nacional para abordar este fenómeno, de modo de garantizar el derecho a una atención adecuada, a diferencia de lo que ocurre hoy día, donde el acceso es parcial.