Los “custodios de la seguridad aérea” que velan para que los pasajeros lleguen bien a destino

• – Profesionales anónimos de la Dirección General de Aeronáutica Civil que cumplen turnos y roles 24/7.

Edmundo Rosinelli

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Llegar a un aeropuerto. Desembarcar las maletas y bolsos. Pasar por el mesón de atención de público. Luego, por la revisión de rutina antes de embarcar al avión y llegar a destino sin novedad.

Para que esto último se dé, es necesaria la intervención de personas muy entrenadas y preparadas. Ese eslabón de la cadena se llama Dirección General de Aeronáutica Civil.

Un aeropuerto no para nunca. El trabajo es 24/7 y solamente en el caso de Punta Arenas en cada turno operan unas 25 personas en promedio.

Le pedimos al jefe de la Zona Aeroportuaria Austral, Sergio Gallo Rosales, que nos hiciera una suerte de “tour” para conocer el trabajo anónimo que realizan los funcionarios de esta repartición.

Ellos son “prestadores de servicios aeronáuticos”, tanto en Punta Arenas como los demás aeródromos de la región. 

“En esa condición, nosotros brindamos distintos servicios, uno de los cuales es el control de tránsito aéreo”, señaló.

Hay otros servicios de apoyo como el que brinda la OfiAcina de Operaciones, donde se presentan los planes de vuelo. Además, ellos manejan toda la información relacionada con la condición de los aeródromos. Por ejemplo, cuando se están realizando trabajos en las pistas, como sucede actualmente con las obras de mejoramientos que se están ejecutando en el aeropuerto de Punta Arenas.

Meteorología

El Centro Meteorológico es otro de los eslabones importantísimos de esta cadena de prestaciones de servicios.

“Ellos son los encargados de proporcionar toda la información meteorológica, tanto a los pilotos de las aeronaves, como también confeccionan el pronóstico público de la región, con las condiciones climáticas”, destacó Gallo.

Mención especial para la seguridad aeroportuaria. Una de las funciones más visibles para los pasajeros. Todos los que han viajado alguna vez saben que es obligación pasar las maletas y bolsos por los equipos de rayos. En pantalla los “custodios de la seguridad aérea” están atentos a que no pase nada indebido, que ponga en peligro la seguridad aérea.

“Ahí, con ellos, la labor es bien visible. Todo el mundo la conoce cuando viajamos porque es el control preventivo de los pasajeros y equipaje que busca prevenir posibles actos ilícitos contra la aviación”, explicó.

Esta parte del proceso incluye el equipaje de mano como el facturado. Se refiere a la carga, que el aeropuerto local mueve muchísima, todos los días.

“Tenemos un sistema de control de carga que se realiza de forma compartida con las empresas aéreas, porque la primera responsabilidad es de ellos. Todo deben chequearlo previamente ellos y después nosotros hacemos una segunda revisión.” 

Salvamento e incendios

El Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios en Aeronaves (Sei) cumple dos roles importantes. Uno es el preventivo, relacionado con los chequeos de pista diarios, cuatro a seis veces o los que sean necesarios, para verificar que la vía esté sin ningún tipo de elemento extraño para el tránsito de las aeronaves,

Otro rol fundamental está dado por el control de la fauna silvestre. El trabajo de los funcionarios busca evitar el ingreso de animales a las pistas. “Ellos realizan chequeos previos a la llegada de los aviones, sobre todo en la época en que hay mayor cantidad de aves en las cercanías para evitar que estén dentro de la pista. Es una labor preventiva muy importante”, acotó el jefe aeroportuario.

Y a mediados de año aplican el Plan Invierno, preocupándose del despeje de todos los contaminantes que producen la nieve y el hielo. Cuentan con máquina especializada para dejar las pistas del aeropuerto operativas.

“Y la función principal, que espero nunca tengamos que verlos en acción, es ante un eventual accidente aéreo, donde deben ejercer la labor de control del fuego para permitir el salvataje de la mayor cantidad posible de personas”.

Torre de control

La torre de control de Punta Arenas es, por ahora, la segunda más alta de Chile, con una altura equivalente a un edificio de 7 pisos,

Como tal se ve de lejos. Y por las películas y reportajes terminan siendo siempre la cara visible de las operaciones aéreas.

Javier Oyarzún Jara, jefe de los servicios de Tránsito Aéreo de la DGAC, dio cuenta de que ellos operan como base de la Zona Aeroportuaria Austral, “y como tal tenemos un centro de control de áreas, que es la dependencia más grande de suministros de servicios de tránsito aéreo, que corresponde a una región de información de vuelo. Solo hay cinco en el país y nosotros somos una, que comienza a la cuadra de Balmaceda y llega hasta el Polo Sur. Todo ese espacio aéreo está bajo la supervisión de nuestro centro de control que tiene radar y comunicaciones de alto alcance”.

Esto es como una posta, en la cual se va transfiriendo siempre la responsabilidad del control del avión y supervisión del vuelo de una dependencia a otra. 

El piloto presenta un plan de vuelo, hora, cantidad de pasajeros, entre muchos otros antecedentes que exige la norma. Eso lo presenta al servicio de tránsito aéreo en la oficina de servicios de vuelo. Luego, el avión toma la pista que va a utilizar para el despegue y, antes de ingresar a ella, pasa a la jurisdicción del controlador local, que mete la aeronave a la pista, la hace despegar y la transfiere al control de aproximación.

Hace la salvedad de que el aeropuerto de Punta Arenas tiene más movimiento que el común de las personas cree, “porque uno no viene todos los días al terminal. Solo cuando viaja y ve un solo avión, pero es mucho más de lo observable. También tenemos vuelos nocturnos, e incluso los transpolares, que entran en nuestro espacio aéreo”, mencionó.