Conflicto vecinal en Santos Mardones deja una persona en prisión y con la cabeza rota por saldo

Durante la madrugada del sábado, en la población Santos Mardones se vivió una violenta situación en el pasaje Llacolén, involucrando a dos vecinos de esta calle en una discusión que terminó en un enfrentamiento a golpes y la detención por parte de Carabineros. Un golpe de fierro en la cabeza y unas amenazas de muerte, proferidas incluso delante de efectivos policiales, fue el saldo de este conflicto vecinal.

Pasadas las 4 de la madrugada comenzó el conflicto, luego de que la víctima en esta causa viera que las puertas de su automóvil, estacionado en las afueras de su casa, estaba abierta con un hombre en las cercanías en actitud sospechosa. Al increparlo para preguntarle de qué se trataba, fue amenazado por esta persona, quien se abalanzó sobre él, lo que lo llevó a responder con un contundente golpe, propinado con una especie de fierro en su cabeza, causándole una contusión craneal y herida cortante. Fue en ese momento de mayor cercanía que la víctima se percata que el hombre a quien golpeó era su vecino de pasaje.

El golpe sólo hizo que el hombre se enfureciera aún más, gritándole amenazas de muerte en su contra que continuaron incluso a la llegada de Carabineros, quienes fueron testigo de estas intimidaciones. Según indicó el fiscal, el imputado amenazó señalándole “que lo mataría y que le quemaría todos los vehículos que tiene fuera de su casa”. Los hechos descritos constituyeron el delito de amenazas no condicionales.

El imputado mantenía una orden de detención vigente en una causa distinta, además de contar con amplio prontuario de condenas, lo que fue el sustento principal de la argumentación del fiscal a la hora de pedir la medida cautelar más gravosa, que es la prisión preventiva.

Lo anterior fue acogido por el Tribunal, decretando la prisión y el ingreso al Centro Penitenciario de Punta Arenas. Se estableció un plazo de investigación de 45 días y se requirió por parte de la defensa que, previo al ingreso al penal, pudiera tener atención hospitalaria producto de sus lesiones, ya que incluso sangraban durante la audiencia.